Manuel Álvarez (1796-1856). Un leonés en el oeste americano. Thomas E. Chavez
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14 Que el comercio de Santa Fe era lucrativo en sus primeros años queda demostrado por un contemporáneo, G. C. Broadhead, quien guardó anotaciones sobre caravanas que volvían de Nuevo México a San Luis. El 18 de octubre de 1834 informó de que una caravana de la compañía St. Vrain-Bent traía “más de 200.000 dólares en especie.” Broadhead, “Notes on Santa Fe Traders,” p. 4, SFTP.
15 Ver Weber, Taos Trappers, para un estudio excelente sobre el papel del comercio de pieles de Nuevo México.
16 Missouri Intelligencer (Fayette), 19 de julio de 1827. Álvarez y Padilla volvieron a Nuevo México con un permiso para viajar a través del territorio indio que había sido expedido por el gobernador William Clark; ver Louise Barry, The Beginning of the West: Annals of the Kansas Gateway to the American West, 1540-1854 (Topeka: Kansas State Historical Society, 1972), p. 146. Ver también David J. Weber, The Extranjeros: Selected Documents from the Mexican Side of the Santa Fe Trail, 1825-1828 (Santa Fe, NM: Stagecoach Press, 1967), p. 43; aquí Álvarez y el resto de la comitiva están registrados por la Secretaria de Relaciones. Llegaron el 12 de noviembre. Álvarez aparece en la lista como nativo de León, residente de Santa Fe, y mercader de profesión. Con todo, Álvarez hizo tres caminatas a través de las llanuras.
17 Weber, Taos Trappers, p. 185.
18 Ibid., p. 164.
19 Dunham, “Manuel Álvarez,” p. 185. Álvarez es mencionado en documentos como Alvareis y Alvaripe, de quien se dice que se casó con una mujer india que le dio tres hijos; uno se murió y se dio a entender que los otros dos fueron enviados a España. La historia no documentada del matrimonio es contradictoria tanto con el testamento de Álvarez como con un árbol genealógico dibujado por él.
20 Warren A. Ferris, Life in the Rocky Mountains, ed. P.C. Phillips (Denver, CO: Old West Publishing, 1940), pp. 192-194.
21 Ver Merrill J. Mattes, “Exploding Fur Trade Fairy Tales,” en Probing the American West, ed. K. Ross Toole et al. (Santa Fe: Museum of New Mexico Press, 1962), p. 96. El capítulo está basado en el artículo de Mattes, leído en el primer encuentro anual de la Western History Association, en la que desacredita la reivindicación de Colter de haber descubierto las maravillas naturales y da crédito cualificado a Álvarez. Ver también Richard A. Bartlett, Nature’s Yellowstone National Park in 1872, (Albuquerque: University of New Mexico Press, 1974), p. 103. Debo rebatir las opiniones de Phillips porque Álvarez no se adentró en la vida montañera hasta 1828. Ver Bartlett, Nature’s Yellowstone, pp. 224-225, fn. 30, y Merrill J, Mattes, “Behind the Legend of Colter’s Hell: The Early Exploration of Yellowstone National Park,” Mississippi Valley Historical Review 36, no. 2 (September 1949): 258.
22 Daniel T. Potts a Robert T. Potts, 8 de julio de 1827, Research Library, Yellowstone National Park, Wyoming.
23 Ferris, Life, p. 259; la historia apareció primero en 1842-1843 en el Western Literary Messenger. Ver también Mattes, “Behind the Legend,” p. 269.
24 Mattes, “Behind the Legend,” p. 271.
25 Dunham, “Manuel Álvarez,” p. 186; borrador por 1.325.98 dólares a Manuel Álvarez, 31 de julio de 1833, PC-M. El antiguo jefe de Álvarez, Louis Papin, recibió un pago de sólo 116.62 dólares; ver Lansing Bloom, “Ledgers of a Santa Fe Trader,” El Palacio 14, no. 9 (May 1923):135.
26 Twitchell, Spanish Archives, vol. 2, p. 626.
27 Para otras versiones de este incidente ver, LeBaron Bradford Prince, Historical Sketches of New Mexico (Kansas City, MO: Ramsey, millet &Hudson, 1883), pp. 241-242; Rex Arrowsmith, ed., Mines of the Old Southwest (Santa Fe, NM: Stagecoach Press, 1963), p. 50; y John M. Townley, “El Placer: A New Mexico Mining Boom Before 1846,” Journal of the West 10, no 1 (January 1971): 108-110.
28 Sadlowski, “Manuel Álvarez,” página 18; Alvin R. Sunseri, “Sheep Ricos, Sheep Fortunes in the Aftermath of the American Conquest, 1846-1861,” El Palacio 83, no. 1 (1977):6.
29 Weber, Taos Traders, p. 40.
30 El último rendezvous tuvo lugar en el Green River, cerca de la boca de Horse Creek, en 1840.
31 Proyecto de ley firmado por David Waldo, 28 de octubre de 1835, AP.
32 Smith abandonó el negocio de las pieles para invertir en comercio en el Camino de Santa Fe, donde murió durante una emboscada comanche.
33 Janet Lecompte, Rebellion in Rio Arriba, 1837 (Albuquerque, Historical Society of New Mexico–University of New Mexico Press, 1985), pp. 13, 19-20.
34 “Los comerciantes estadounidenses de Santa Fe al honorable Powhatan Ellis, ministro plenipotenciario y enviado extraodinario de los Estados Unidos de América a la República de México”, 7 de septiembre de 1837 (a partir de aquí comerciantes a Ellis), BR, no. 8, p. 3.
35 Ibid.
36 Un historiador ha señalado que la propiedad de los fallecidos fue subastada según la ley. Ver Phillip Reno, “Rebellion in New Mexico-1837,” New Mexico Historical Review 40, no. 3 (1965): 197-213. Esta puede haber sido la razón de que incluso tras la Victoria de nuevas fuerzas gubernamentales del sur, la separación de los comerciantes no vino a continuación.
37 Comerciantes a Ellis, 7 de septiembre de 1837, BR, no. 8, p. 2.
38 Manuel Armijo a Jose Sutton, 25 de septiembre de 1837, en Reno “Rebellion,” pp. 202-203. Álvarez estaba entre aquellos a los que se les dieron las