sistemas, que ahora están centralizados, han crecido hasta ser los aspectos más importantes de la vivienda, más que la vivienda misma. Ahora somos dependientes de ellos y vulnerables si carecemos de ellos. Cuando los sistemas no funcionan debido a alguna catástrofe como un huracán, tornado o sismo, la gente se reúne en instalaciones, como gimnasios, que cuentan con sistemas de emergencia. La vivienda actual no es funcional sin los sistemas. Construimos todo tipo de compartimentos con madera, concreto, acero y vidrio. Hasta les ponemos ruedas, pero siguen siendo solo compartimentos a los que necesitamos proveer de apoyo para su sostén. Uno puede fácilmente imaginarse las limitaciones, dependencia y vulnerabilidad al que está sujeto, en un sistema de apoyo como el que se ofrece en un hospital. ¿Qué sucedería si uno se diera cuenta que tiene que permanecer en un sistema de apoyo el resto de su vida? Muchos preferirían morir a vivir en tal forma. Pues tal es la forma en que estamos viviendo.
También estamos muriendo esta manera. El sistema nos proporciona por un lado poder y por otro veneno. La lluvia ácida, desperdicio radioactivo, telarañas de cables de electricidad, ríos y océanos contaminados, vida silvestre en peligro de extinción, es todo parte del ‘precio’ que pagamos para hacer que los sistemas de apoyo a la vida sean funcionales en el actual concepto que tenemos de la vivienda.
Una persona que depende de un sistema de apoyo de vida en un hospital, tiene que estar siempre lo suficientemente cerca de los sistemas que le necesitan ‘conectar’ para mantenerla viva. Lo mismo sucede con nuestro actual concepto de vivienda. Esta necesidad de ser conectados, nos impide utilizar miles de acres de tierra dinámica y bella. Algunos de los lugares mas hermosos del planeta son considerados inhabitables debido a que no llegan a ellos los sistemas que apoyan la vivienda. Las limitaciones, dependencia, vulnerabilidad y el veneno nos dan muchas razones para cuestionar el actual concepto de vivienda y preguntarnos, ‘¿Es esto realmente algo con lo que queremos intentar llegar al futuro?’
LOS SISTEMAS DE LA VIVIENDA ACTUAL
Los sistemas que hacen habitables los actuales compartimientos son los siguientes:
Sistemas de producción y distribución de energía eléctrica:
Estos sistemas proveen la energía eléctrica para la luz y los aparatos eléctricos y en muchos casos, calefacción y aire acondicionado. En algunos casos, el bombeo de agua a los compartimentos también depende de estos sistemas. Para poder abastecer la demanda, estos sistemas necesitan producir peligrosos efectos secundarios, y envolver al planeta en una telaraña de cables.
El precio de esta energía, en términos monetarios, es alto y sigue subiendo. Estos sistemas son propiedad de corporaciones cuya finalidad no siempre coincide con los mejores intereses de la gente o el planeta. El precio de esta energía, ecológicamente hablando, equivale al agotamiento de recursos que requirieron de millones de años para producirse, así como la contaminación de un medio ambiente delicado que da sostén a la vida. Ya no es seguro que sigamos utilizando sistemas, y su confiabilidad es cuestionable a medida que viajamos hacia el futuro.
Sistemas Hidráulicos:
Los sistemas hidráulicos centralizados siempre utilizan electricidad en alguna de sus formas, por lo que los sistemas hidráulicos dependen de los sistemas eléctricos. Esto, además del cuestionable proceso de purificación y tratamiento de agua, deja a muchas ciudades, con agua que no es potable y dependiendo de la red de energía. En situaciones rurales, el agua bombeada de pozo casi siempre depende de la red eléctrica y en muchas áreas ya ha dejado de ser potable debido al drenaje, orina del ganado o desperdicio radioactivo.
Sistemas de Drenaje:
En las ciudades, toda el agua de desperdicio va a dar a los sistemas de drenaje, y en áreas rurales, va a plantas de tratamiento de drenaje más pequeñas. En áreas muy rurales, toda va a dar a sistemas sépticos. El 80% de esta agua podría re-utilizarse como agua clara. En la mayoría de los casos, esto ni siquiera se considera, por lo que nos quedamos con cantidades enormes de agua de drenaje que necesita ser tratada. El resultado es una contaminación extrema en y alrededor del agua que esta cerca de ciudades, y el desperdicio de excelente agua de riego en áreas rurales. Una vez más, la mayoría de los sistemas de drenaje dependen en alguna forma del sistema eléctrico, para poder funcionar.
Sistemas de Gas:
Los sistemas de gas natural son los más limpios y los que menos destruyen el planeta. Sin embargo, en momentos de una catástrofe, con frecuencia fallan (la tubería se rompe). La distribución de este gas es potencialmente peligroso y poco confiable en momentos de desastre y seguirá siendo cada vez más costoso. Si el funcionamiento total de una casa dependiera del gas, este hogar estaría tan vulnerable como los que utilizan cualquier otro sistema. Por supuesto, el gas tiene que ser llevado en un medio de transporte a las áreas rurales, que es una vulnerabilidad obvia en momentos de desastre.
Sistemas de Alimento:
La alimentación ha llegado a ser tan ‘sistema’ como cualquier otra cosa. El sistema centralizado de producción de alimentos es definitivamente uno de los sistemas principales de apoyo para el hábitat humano en este planeta. Los compartimentos de vivienda actuales no hacen nada para satisfacer las necesidades alimenticias de la humanidad. El alimento se produce masivamente, sin tener en cuenta la salud humana, sino la ganancia. Desafortunadamente, el dinero es el principal objetivo de todos los sistemas. Los diferentes productos químicos utilizados para producir más alimento y más rápido, han afectado radicalmente la calidad de las frutas, legumbres, productos lácteos y carnes. (Lea 'Una Dieta para Una Nueva America' por John Robbins). La calidad del agua mundial también empieza a afectar a los peces. La distribución de alimento depende de vehículos que pueden o no funcionar durante desastres económicos, naturales o producidos por el hombre. El actual sistema de alimento es, por lo tanto, poco confiable e insalubre. Además, está tan envuelto en el sistema monetario, que casi deja de ser alimento. Hablando de envoltura, también está envuelto en varios plásticos y paquetes que son un serio problema de eliminación. Los árboles y los animales no tienen que envolver sus alimentos, ¿por qué nosotros si? ¿Es acaso porque somos inteligentes?
Sistemas de Materiales:
Los principales materiales utilizados para compartimentos de vivienda tienen muchos factores que merecen reconsideración.
1. Se utiliza demasiada madera y aunque esto es un recurso renovable, los árboles requieren de tiempo para crecer.
2. Muchos materiales se fabrican en áreas centralizadas y tienen que ser transportados por todo el país. Este es un factor económico y energético.
3. La mayoría de los materiales requieren de habilidades específicas para ser utilizados. Esto los deja fuera del alcance de personas sin habilidades específicas.
4. Se requiere de mucha energía para la fabricación de materiales y por consiguiente el resultado es mucha contaminación.
5. Mucho material nuevo es nocivo. Desafortunadamente, esto no se es descubierto hasta después de muchos años de utilización.
6. Los materiales manufacturados tienden a imponer las características de la vivienda. Debería ser a la inversa.
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