Intercambio político. Carlos Ricardo Aguilar Astorga
Скачать книгу в различных форматах или читать онлайн на сайте.
El intercambio político es un proceso en el cual diferentes actores redefinen el sentido de su actuar de manera colectiva, son acuerdos conjuntos entre actores de diversa índole en medio de relaciones asimétricas de poder. Los actores involucrados tienen en común un asunto o situación que desean cambiar o mantener, por lo regular estos enfoques son diferentes y obligan a los demandantes a negociar bienes de naturaleza diversa. Esto obliga a generar alianzas, acuerdos, pactos, que suponen una conducción de las particularidades a una lógica colectiva. Es decir, el intercambio político no es la suma de las particularidades, sino supone un resultado dialógico en el que las singularidades quedan reafirmadas al mismo tiempo que se construye un proceder común. El texto que tiene usted en sus manos es resultado, por un lado, de la sistematización que se hizo de los aprendizajes en estudios de caso en trabajos previos (Aguilar, 2015, 2021), en los que el marco teórico metodológico fue muy semejante, el presente trata de discutir sobre estos pilares y repensar otros, tal es el caso de una nueva variable que, de hecho, sería central. Ya Cacciari y Rusconi insistían en el carácter detonante del factor crisis y aunque en estudios previos no habíamos dilucidado su importancia, ya preveíamos su centralidad, sin embargo, sigue habiendo un problema con esta variable; consideramos que, si bien es un factor detonante y que favorece lo nuevo y los reacomodos, también es un elemento que crispa las energías, pues muchas de las acciones se contraen y se arrinconan en las brechas conservadoras. Finalmente, ponemos a disposición del amable público lector, una obra a la que le auguramos salud y plenitud a la categoría de intercambio político, pues como dice Cacciari y Rusconi, el momento fundante se da en las crisis y qué mejor momento que la época actual, llena de incertidumbres y de la necesidad de replanteamientos urgentes y sensatos. Hemos visto el declive de la otrora doctrina de la economía neoclásica y de su apropiación del sentido individualista que le dieron a la libertad y al conocimiento. Nos encontramos en un momento de crisis en el que es posible recuperar otros parámetros y horizontes de la comprensión de lo político y de las políticas; no obstante, la crisis en tanto que factor detonante del intercambio es eso, un elemento disparador, pero no siempre sabemos en qué dirección.