La Celestina. Fernando de Rojas

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La Celestina - Fernando de Rojas

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CAL.—yre como aquel contra quien solamente la aduersa fortuna pone su estudio con odio cruel. Sempronio: Sempronio: Sempronio: donde esta este maldito? SEMPRONIO.—aqui estoy, senor, curando destos cauallos. CAL.—pues como sales de la sala? SEMP.—abatiose el girifalte, e vinele enderezar en el alcandara. CAL.—assi los diablos te ganen: assi por infortunio arrebatado perezcas / o perpetuo intollerable tormento consigas: el qual en grado incomparable a la penosa e desastrada muerte que espero traspassa. Anda, anda, maluado, abre la camara e endereza la cama. SEMP.—senor, luego. hecho es. CAL.—cierra la ventana e dexa la tiniebla acompanar al triste, e al desdichado la ceguedad: mis pensamientos tristes no son dignos de luz. O bienauenturada muerte aquella que deseada a los afligidos viene. O si viniessedes agora, Eras e Crato, medicos, sentiriades mi mal. O piedad de silencio, inspira en el Pleberico corazon: porque sin esperanza de salud no embie el espiritu perdido con el desastrado Piramo e de la desdichada Tisbe. SEMP.—que cosa es? CAL.—vete de ay, no me fables: sino quiza ante del tiempo de mi rabiosa muerte mis manos causaran tu arrebatado fin. SEMP.—yre, pues solo quieres padecer tu mal. CAL.—ve con el diablo. SEMP.—no creo, segun pienso, yr comigo el que contigo queda. O desauentura. O subito mal: qual fue tan contrario acontescimiento que assi tan presto robo el alegria deste hombre: e lo que peor es, junto con ella el seso? dexarle he solo? o entrare alla? Si le dexo, matarse ha. si entro alla, matarme ha. Quedese, no me curo: mas vale que muera aquel a quien es enojosa la vida: que no yo, que huelgo con ella. Avnque por al no deseasse viuir: sino por ver a mi Elicia me deuria guardar de peligros. pero si se mata sin otro testigo: yo quedo obligado a dar cuenta de su vida. Quiero entrar. Mas puesto que entre, no quiere consolacion ni consejo. asaz es senal mortal no querer sanar. Con todo, quierole dexar vn poco: desbraue. madure. que oydo he dezir que es peligro abrir o apremiar las postemas duras: porque mas se enconan. este vn poco. dexemos llorar al que dolor tiene: que las lagrimas e sospiros mucho desenconan el corazon dolorido. E avn si delante me tiene, mas comigo se encendera. que el sol mas arde donde puede reuerberar. la vista a quien objecto no se antepone, cansa: e quando aquel es cerca, aguzase: por esso quierome sofrir vn poco: si entretanto se matare: muera. quiza con algo me quedare que otro no lo sabe: con que mude el pelo malo. Avnque malo es esperar salud en muerte agena. Y quiza me engana el diablo: e si muere matarme han: e yran alla la soga e el calderon. Por otra parte dizen los sabios que es grande descanso a los afligidos tener con quien puedan sus cuytas llorar. Y que la llaga interior mas empece. Pues en estos estremos en que estoy perplexo: lo mas sano es entrar e sofrirle e consolarle: porque si possible es sanar sin arte ni aparejo: mas ligero es guarescer por arte: e por cura. CAL.—Sempronio. SEMP.—senor. CAL.—dame aca el laud. SEMP.—senor, vesle aqui. CAL.—qual dolor puede ser tal: que se yguale con mi mal? SEMP.—destemplado esta esse laud. CAL.—como templara el destemplado? como sentira el armonia aquel que consigo esta tan discorde? aquel a quien la voluntad a la razon no obedece? quien tiene dentro del pecho aguijones, paz: guerra: tregua: amor: enemistad: injurias, pecados: sospechas, todo a vna causa? Pero tane e canta la mas triste cancion que sepas. SEMP.—mira Nero de Tarpeya a Roma como se ardia: gritos dan ninos e viejos: e el de nada se dolia. CAL.—mayor es mi fuego: e menor la piedad de quien yo agora digo. SEMP.—no me engano yo, que loco esta este mi amo. CAL.—que estas murmurando, Sempronio? SEMP.—no digo nada. CAL.—di lo que dizes, no temas. SEMP.—digo que como puede ser mayor el fuego que atormenta vn viuo, que el que quemo tal cibdad e tanta multitud de gente? CAL.—como? yo te lo dire: mayor es la llama que dura ochenta anos que la que en vn dia passa: e mayor la que mata vna anima que la que quema cient mill cuerpos. Como de la aparencia a la existencia: como de lo viuo a lo pintado: como de la sombra a lo real: tanta diferencia ay del fuego que dizes al que me quema. Por cierto si el del purgatorio es tal: mas querria que mi spiritu fuesse con los de los brutos animales: que por medio de aquel yr a la gloria de los sanctos. SEMP.—algo es lo que digo. a mas ha de yr este hecho: no basta loco, sino ereje. CAL.—no te digo que fables alto quando fablares? Que dizes? SEMP.—digo que nunca dios quiera tal: que es especie de heregia lo que agora dixiste. CAL.—porque? SEMP.—porque lo que dizes contradize la cristiana religion. CAL.—que a mi? SEMP.—tu no eres cristiano? CAL.—yo? Melibeo soy. e a Melibea adoro e en Melibea creo: e a Melibea amo. SEMP.—tu te lo diras. como Melibea es grande: no cabe en el corazon de mi amo: que por la boca le sale a borbollones. No es mas menester: bien se de que pie coxqueas: yo te sanare. CAL.—increyble cosa prometes. SEMP.—antes facil. Que el comienzo de la salud es conoscer hombre la dolencia del enfermo. CAL.—qual consejo puede regir lo que en si no tiene orden ni consejo? SEMP.—ha ha ha. esto es el fuego de Calisto? Estas son sus congoxas? Como si solamente el amor contra el asestara sus tiros. O soberano dios, quan altos son tus misterios. Quanta premia pusiste en el amor: que es necessaria turbacion en el amante. Su limite posiste por marauilla: paresce al amante que atras queda. todos passan, todos rompen: pungidos e esgarrochados como ligeros toros: sin freno saltan por las barreras. Mandaste al hombre por la muger dexar el padre e la madre: agora no solo aquello, mas a ti e a tu ley desamparan, como agora Calisto, del qual no me marauillo: pues los sabios, los santos, los profetas por el te oluidaron. CAL.—Sempronio. SEMP.—senor. CAL.—no me dexes. SEMP.—de otro temple esta esta gayta. CAL.—que te paresce de mi mal? SEMP.—que amas a Melibea. CAL.—e no otra cosa? SEMP.—harto mal es tener la voluntad en vn solo lugar catiua. CAL.—poco sabes de firmeza. SEMP.—la perseuerancia en el mal no es constancia mas dureza / o pertinacia la llaman en mi tierra. Vosotros los filosofos de Cupido llamalda como quisierdes. CAL.—torpe cosa es mentir "el" que ensena a otro; pues que tu te precias de loar a tu amiga Elicia. SEMP.—haz tu lo que bien digo: y no lo que mal hago. CAL.—que me reprobas? SEMP.—que sometes la dignidad del hombre a la imperfecion de la flaca muger. CAL.—muger? o grossero: dios, dios! SEMP.—e assi lo crees, o burlas? CAL.—que burlo? por dios la creo: por dios la confiesso: e no creo que ay otro soberano en el cielo, avnque entre nosotros mora. SEMP.—ha ha ha. oystes que blasfemia? vistes que ceguedad? CAL.—de que te ries? SEMP.—riome: que no pensaua que hauia peor inuencion de pecado que en Sodoma. CAL.—como? SEMP.—porque aquellos procuraron abominable vso con los angeles no conocidos: e tu con el que confiessas ser dios. CAL.—maldito seas, que fecho me has reyr, lo que no pense ogano. SEMP.—pues que: toda tu vida auias de llorar? CAL.—si. SEMP.—porque? CAL.—porque amo a aquella, ante quien tan indigno me hallo: que no la espero alcanzar. SEMP.—o pusilanimo: o fideputa! que Nembrot: que magno Alexandre: los quales no solo del senorio del mundo: mas del cielo se juzgaron ser dignos. CAL.—no te oy bien esso que dixiste; torna, dilo, no procedas. SEMP.—dixe que tu, que tienes mas corazon que Nembrot ni Alexandre, desesperas de alcanzar vna muger. muchas de las quales en grandes estados constituydas se sometieron a los pechos e resollos de viles azemileros: e otras a brutos animales: no has leydo de Pasife con el toro? de Minerua con el can? CAL.—no lo creo, hablillas son. SEMP.—lo de tu abuela con el ximio, hablilla fue? testigo es el cuchillo de tu abuelo. CAL.—maldito sea este necio, e que porradas dize. SEMP.—escoziote? lee los ystoriales: estudia los filosofos: mira los poetas: llenos estan los libros de sus viles e malos exemplos: e de las caydas que leuaron los que en algo, como tu, las reputaron. Oye a Salomon: do dize que las mugeres e el vino hazen a los hombres renegar. consejate con Seneca e veras en que las tiene. escucha al Aristoteles: mira a Bernardo: gentiles: judios: cristianos: e moros: todos en esta concordia estan. Pero lo dicho e lo que dellas dixere: no te contezca error de tomarlo en comun, que muchas houo: y ay sanctas e virtuosas e notables cuya resplandesciente corona quita el general vituperio. Pero destas otras, quien te contaria sus mentiras: sus trafagos: sus cambios: su liuiandad: sus lagrimillas: sus alteraciones: sus osadias? que todo lo que piensan, osan sin deliberar: sus dissimulaciones: su lengua: su engano: su oluido: su desamor: su ingratitud: su inconstancia: su testimoniar: su negar: su reboluer: su presuncion: su vanagloria: su abatimiento: su locura: su desden: su soberuia: su subjecion: su parleria: su golosina: su luxuria e suziedad. su miedo: su atreuimiento: sus hechizerias: sus embaymientos: sus escarnios: su deslenguamiento: su desuerguenza: su alcahueteria. Considera que sesito esta debaxo de aquellas grandes e delgadas tocas: que pensamientos so aquellas gorgueras: so aquel fausto: so aquellas largas e autorizantes ropas. Que imperficion: que aluanares debaxo de templos pintados. Por ellas es dicho: arma del diablo: cabeza de pecado: destruycion de parayso. No has rezado en la festiuidad de Sant Juan baptista, do dize: las mugeres e el vino hazen los hombres renegar: do dize esta es la muger, antigua malicia que a Adam echo de los deleytes de parayso? Esta el linaje humano metio en el infierno. A esta menosprecio Helias propheta &c.? CAL.—di pues, esse Adam. esse Salomon.

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