La Noche Oscura Del Alma. Aldivan Teixeira Torres
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Después de caminar un tiempo, mi ritmo me lleva a un lugar plano, exuberante y enorme, con un lago en el centro. En sus orillas, una mujer está saludándome, llamándome. Por curiosidad, yo respondo a su llamada y me acerco. Hasta llegar a ella, empiezo la conversación:
— ¿Es usted la dueña del misterio del origen de la noche oscura del alma?
—No, mi estimado. Pero puedo ayudar.
Dicho esto, la mujer se mueve de forma rápida y en pocos segundos se coloca detrás de mí, empujándome hacia el lago. Indefenso, entro en el agua. En este momento, la montaña tiembla, las fuerzas gravitacionales son afectadas, el cielo se oscurece y mi cuerpo asciende a una velocidad enorme. Poco a poco pierdo mis sentidos y aparecen entonces las visiones. Me concentro en una de ellas, y como si estuviera viajando a través del tiempo, veo una gran explosión y sus consecuencias. En esa visión particular, contemplo la creación de los sistemas solares y todos sus elementos creadores, lo que representa la creación de la materia. Además de ésta, ocurrió simultáneamente la creación espiritual de todos los seres humanos. En éste, en particular, observo los ejércitos de ángeles bajo el mando de un único maestro, ayudado por un sirviente llamado Lucifer, un ángel muy útil y eficiente. Todo iba bien en el plan espiritual, hasta que un día el Maestro de los Ejércitos tuvo que irse con el objetivo de crear nuevas galaxias en universos distantes, y así dejó a cargo del cielo a Lucifer. Tan pronto que el Maestro se fue, Lucifer creció en importancia y el poder se le subió a la cabeza. En un instante decidió que ya no sería un sirviente y se rebeló con algunos otros ángeles. Obtuvo partidarios de todas las jerarquías: Tronos, poderes, Ikiriris, arcángeles, ángeles, etc. Sin embargo, los planes de Lucifer fueron descubiertos a tiempo por otro sirviente: Miguel. Éste no estaba de acuerdo con la ambición de su hermano Lucifer y con otros ángeles organizaron un contraataque. Así comenzó la guerra. Por un lado, los que apoyaron Miguel y Yahvé como su único maestro. Por otro lado, los que apoyaron a Lucifer como su maestro. Este momento fue el más delicado de todo el Universo, porque se perdieron muchas vidas (miles de millones) en aras de poder, es decir, una causa sin sentido. Después de numerosas batallas, Miguel y sus ángeles fueron capaces de rodear a Lucifer y sus seguidores, derrotándolos, y encerrándolos en el temido abismo de la Tierra, en habitaciones insuperables. Así terminó la guerra y el Maestro regresó del viaje, ocupando su legítimo y merecido lugar. A su regreso, se aseguró de recompensar a Miguel y sus seguidores por su valor en la batalla y les dio lugares más altos en la administración del Reino de los Cielos. En cuanto a Lucifer, como castigo, fue convertido en forma de horrendo dragón y el fuego del abismo estaba prendido, quemando poco a poco los que allí estaban.
Es en este preciso instante en que la temida noche oscura del alma emerge y la sede del poder y el orgullo de ser sus causas primitivas. Tras ser testigo de todos estos hechos, las visiones desaparecen de mi mente y en un instante estoy de vuelta, para mi sorpresa, a orillas del lago. Miro alrededor y no veo a nadie. Decido a continuación, volver inmediatamente a la cabaña, la mayor parte de la noche había pasado. Rápidamente, cubro el camino de vuelta en un momento y en pocos pasos estoy de vuelta a la cabaña. Voy directo a mi cama en busca de un sueño reparador. Acercándome rápidamente caigo en él. Mañana será otro día y voy a continuar recorriendo el temido camino de la oscuridad en busca de dicho arduo conocimiento.
Otro día
El día finalmente amanece y los primeros rayos de sol me dan en la cara, que me despiertan. Al despertar recojo mis energías y poco a poco me levanto, estirándome, decido tener un baño matutino. Así, rápidamente me voy al improvisado baño. A los pocos pasos, comienzo a prepararme para el baño. Me desnudo rápidamente, me hecho jabón y salpico agua fría sobre mi cuerpo. La sensación de frío me recuerda la noche anterior. Analizando cuidadosamente el último desafío, termino por concluir que el descubrimiento del origen de la noche oscura del alma y el significado exacto del orgullo me hizo entender muchas cosas, porque la gente se hunde y permanece en esa nube oscura. En mi humilde opinión, la mayoría de la gente está muy ligada a sí mismos y al mundo material. Como resultado de ello, no ven los errores que cometen a diario en busca de poder, la riqueza, ostentación social y vanidad. A medida que pasa el tiempo, la situación espiritual de este tipo de persona se complica aún más debido a que continúan errando y no son capaces de arrepentirse y de perdonar. Y las consecuencias no se detienen ahí. Poco a poco, la nube de la noche oscura se vuelve más gruesa y su influencia en última instancia afecta a otros sentimientos de la persona. Un paso más y la gente llega a la orilla del abismo sin retorno: Marginalidad, actos vergonzosos, crueldad y falta de ética entre otros. En este preciso momento, si no hay divina o angelical (seres comprometidos con la bondad) intervención, la noche oscura incluso puede condenar. Sin embargo, todavía hay un rayo de esperanza mientras hay vida, porque ya habido casos de corazones endurecidos que se salvan en el último momento. Uno de ellos es el crucificado junto a Cristo, que antes del calvario pidió perdón y eso Jesús lo recuerda al llegar a su reino. En ese momento, para sorpresa de todos, Jesús prometió: Te garantizo que estarás conmigo en el paraíso en hoy. Esa actitud del maestro muestra la grandiosidad de Dios y la fuerza del perdón frente a la influencia de la noche oscura.
Me olvido de todas las ansiedades y preocupaciones, sólo me concentro en el baño. Elimino por completo mis impurezas me pongo jabón de nuevo y me tiro agua más fría sobre mi cuerpo. Cuando estoy listo, agarro la toalla, me seco, me pongo ropa limpia y finalmente salgo del baño. Saliendo me encuentro cara a cara con ni más ni menos