Aplicación de otros acabados decorativos. MAMR0208. Juan Miguel Pascual Cortés

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Aplicación de otros acabados decorativos. MAMR0208 - Juan Miguel Pascual Cortés

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lijadoras se puede realizar el decapado mecánico con mayor rapidez y calidad, pero presenta el inconveniente de que no suele llegar a las molduras y a determinados rincones de los muebles.

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      Lijadora vertical para arrancar las capas de barniz

       Decapado químico

      El decapado químico, como su nombre indica, consiste en la aplicación de productos químicos especialmente diseñados para tal fin. Estos productos ablandan la pintura y barnices, para que puedan ser retirados con espátulas, lanas de acero, etc.

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      Mueble decapado con sosa cáustica

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       Consejo

      Es un sistema muy rápido y eficaz, pero se debe tener cuidado porque los restos de componentes químicos pueden estropear el acabado que se aplique posteriormente, por lo que se deben limpiar las superficies con mucho cuidado antes de aplicar el producto de acabado nuevo.

      Los productos y métodos más empleados en el sistema de decapado químico son:

      1 Sosa caústica: es un sistema muy económico, pero requiere de mucho espacio ya que hay que lavar el mueble con abundante agua y presenta el inconveniente de que tiende a oscurecer la madera.

      2 Decapante: es el sistema que mejor resultado ofrece, es limpio y rápido. El proceso de aplicación es el siguiente:Verter la cantidad que se necesite en un recipiente adecuado.Extender con una brocha de forma generosa por la superficie a tratar y esperar a que el producto actúe levantando el barniz antiguo.Pasados unos minutos, el producto comienza a hacer efecto ablandando la pintura.Se quita, con la ayuda de una espátula, la pasta resultante de la mezcla del decapante con la pintura.Donde no sea posible utilizar espátulas o rascadores, se utilizará estropajo de acero y disolvente.Se ha de rematar el trabajo usando estropajo de acero.Se repetirá la aplicación cuantas veces sea necesaria hasta llegar a la madera.Por último, eliminar cualquier resto de producto y lavar con disolvente retirando los restos de suciedad con trapos limpios.

      3 Aplicar una fuente de calor: es un proceso más delicado, consiste en la aplicación, mediante sopletes o pistolas de aire caliente especiales, de calor en las superficies que necesitan ser decapadas. Esto hace que se reblandezca el producto y se vuelva viscoso, pudiendo ser retirado con relativa facilidad con una espátula adecuada. El principal inconveniente que presenta este sistema es que se corre el peligro de calentar en exceso la superficie y quemar la madera, por lo que es conveniente usar este sistema para arrancar las primeras capas de pintura.

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      Uso de la pistola decapadora

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       Aplicación práctica

       Antonio es un trabajador autónomo que tiene un taller que se dedica a la aplicación de decoraciones en muebles. Recientemente, un cliente le ha encargado un trabajo que consiste en la recuperación de una mesita que presenta un acabado de barniz muy deteriorado. Antonio quiere comenzar a realizar el trabajo. Para ello, debe tener en cuenta lo siguiente:

      1 El tipo de acabado que el cliente quiere es de goma laca a muñequilla.

      2 El cliente desea que la mesita presente un acabado perfecto.

      3 La mesita se compone de piezas de madera maciza y otras, como la encimera, que es de tablero chapeado.

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      Mesita antes de la aplicación del acabado.

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      Aspecto final que debe presentar una vez concluido el trabajo.

       ¿Qué procedimiento deberá seguir Antonio para cumplir las exigencias del trabajo?

       SOLUCIÓN

      Para cumplir con las exigencias que el trabajo requiere, Antonio deberá seguir, en este orden, el siguiente procedimiento:

      1 Un examen visual general de la mesita revisando el tipo de madera, las partes macizas, molduras, etc.

      2 Proceder al decapado usando un decapante químico e ir retirando con una espátula las diferentes capas de barniz hasta llegar a la madera. Para las molduras y rincones usará una rasqueta de la medida apropiada. Una vez hecho esto, lavará con disolvente y trapos limpios los restos de producto que pudieran quedar.

      3 Ir usando diferentes granos de lijas de más basto (180 a 220) a muy fino (280 a 360) hasta que la superficie de madera esté completamente lisa y fina. Procure lijar siempre en el sentido de la veta, y tenga especial cuidado con las partes de la mesita que son de tableros rechapados, ya que se corre el peligro de arrancar con la lija parte del chapado.

      4 Eliminar todos los restos de polvo y proceder a aplicarles la goma laca con la ayuda de una muñequilla, dando tantas manos sean necesarias hasta conseguir la calidad de acabado deseada.

      5 Si la última capa presentara pequeños arañazos e imperfecciones, se procederá a pulir la superficie.

      El barnizado tendrá siempre presente que la mayoría de productos que maneja son químicos, por lo que deberá tener bien localizadas y archivadas todas las hojas de seguridad de los mismos, en estas hojas se detallan aspectos tan importantes como su transporte, almacenamiento, peligros que se pueden ocasionar, etc.

      Otro documento importante que se debe manejar para aplicar correctamente los acabados decorativos en la madera son las hojas de ruta. Con ellas se pretende “establecer una ruta” y una secuencia de las etapas que se requiere para realizar un acabado. Así, la pieza u objeto va pasando por la ruta, de la primera fase o máquina a la segunda, y así sucesivamente hasta que esté terminada.

      Es necesario conocer de antemano las exigencias y características en el proceso del acabado decorativo (calidad final, uso interior/exterior, precio, etc.) pues de ello depende en gran medida el sistema de proceso que se deberá seguir en cada caso. Se debe tener en cuenta que en la mayoría de los casos, lo que eleva el precio de los muebles es el tipo de acabado decorativo que posee, más que la propia madera en sí misma.

      El barniz antiguo que poseen algunas maderas viejas se debe retirar antes de comenzar con el proceso de aplicación del nuevo, ya que los productos de acabados resbalan en superficies que ya están barnizadas, por lo que resulta imposible trabajar sobre ellas. Para ello, deberá emplear el decapado químico o mecánico, aunque en muchos casos es aconsejable la combinación de ambos sistemas.

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