importante es integrar todos los elementos en nuestra vida tanto a nivel físico como espiritual.
Las formas tetraédricas, que pueden ser también en forma de lámparas y decoración, hacen que el fuego se active en nuestras vidas para así sanar emociones y bloqueos.
-Aire: el Octaedro regenta el aire en Geometría Sagrada. Ocho caras triangulares de sanación para todo lo relacionado con el corazón. En Feng Shui este elemento es más conocido como viento y, entre otros muchos aspectos, ayuda a la buena metabolización de las grasas.
Un desequilibrio con este elemento puede ocasionar que las grasas se distribuyan de forma desigual produciendo celulitis o engordar a pesar de las dietas.
-Éter: el Dodecaedro en Geometría Sagrada representa el éter y es muy necesario para poder comprender cómo funciona el mundo multidimensional.
Despertamos códigos y canalizamos de forma fluida al activar este elemento.
Con el éter empezamos a vibrar en distintas dimensiones. Por eso es tan importante, para poder hablar desde nuestro Ser, activar nuestra glándula pineal para permitirnos Ver, despertar nuestro tubo pránico de luz y conectar con nuestra esencia multidimensional.
-Madera: la madera es una energía viva, y la encontramos en la naturaleza especialmente.
La madera nos hace fluir y seguir adelante. Una combinación perfecta para la integración y activación en nuestras vidas sería unir la madera a la Geometría sagrada. Creo que es uno de los elementos más poderosos para sentirla. La Geometría Sagrada en madera natural nos hará evolucionar y que no nos estanquemos. Aparte del cristal de cuarzo, la madera sería el segundo elemento más importante y aconsejable para utilizar la Geometría Sagrada.
-Metal: a veces necesitamos introspección, escucharnos para seguir con nuestro trabajo, y para ello el metal es necesario.
Así que solo lo utilizaremos, especialmente, cuando estemos en esa faceta de nuestra vida en que necesitemos investigar y descubrir misterios, ya que permite que la mente se centre y focalice en lo que necesita en ese momento.
-Αμνιο AMNIO: del griego “líquido amniótico”. ¿Qué nos intentan decir?
Seguí preguntando: ¿por qué AMNIO? Resulta que la integración y activación de esos siete elementos puede hacer en nosotros como un renacimiento, una resurrección, una sanación intensa, como volver al útero de nuestra madre y alimentarnos de nuevo de ese elemento de luz y de vida que era el AMNIO, líquido amniótico.
Realmente sorprendente.
He de aclarar que, normalmente, las canalizaciones no se realizan con una intención, sencillamente se conecta y, baja la información adecuada, la decodificación exacta que ellos quieren transmitirnos.
De hecho, como ya comenté al principio, es mi Yo Superior, mi Ser único y perfecto que se encuentra en un punto y lugar del espacio, el cual se conecta con un nombre y da información exclusiva a la que normalmente no podríamos acceder fácilmente, pero a través de ese Yo dimensional sí es posible hacerlo e incluso vivirlo de forma rápida y segura.
El nombre de mi Ser Superior es AHVVEA X y la información me es transmitida desde la 13D.
Meditación de los Siete Elementos Amnio
Conectamos con la imagen del crop circle con los siete elementos.
Inspiramos y exhalamos muy suavemente.
Mientras, nos dicen que primero hay que conectar con el elemento fuego, nos marcan el tetraedro para empezar, y sentiremos una energía toroidal que nace de nuestros pies y va ascendiendo por el plexo solar y el corazón, eliminado y transmutando el dolor, los apegos, el odio, las preocupaciones.
Todo es transmutado por el fuego sanador, sube por nuestra cabeza, y se expande de forma toroidal. Seguimos con la imagen del heptagrama con los elementos para continuar ¡con el elemento viento!
Nuevamente se moverá por energía toroidal. La energía del toroide va subiendo por los pies, el plexo solar, el corazón, y será en él donde lo sentiremos trabajar.
Nos limpia el corazón, nos regenera mientras sentimos la palabra AMNIO como si fuera un mantra decir ¡¡AM!! Se expande desde nuestro corazón al exterior desde nuestro toroide, seguimos AAAMMNIOOO y exhalamos, todo es regenerado y nuestro corazón vibra nuevamente feliz.
El elemento metal se muestra seguidamente. Entra suave siguiendo el ritmo del toroide, que no cesa. Al subir y salir por nuestra cabeza, podemos expandir esos proyectos que queremos que estén pronto, nuevos trabajos y nuevas ideas.
El metal nos ayuda a centrarnos en lo que necesitamos en estos momentos. La tierra le sigue fluyendo a nuestro toroide para asentarnos, trabajar la abundancia y equilibrar todos los elementos activados.
El agua nace de la forma y sube por nuestro toroide limpiando células, órganos internos, articulaciones y puntos a sanar. Finalmente nos muestran la madera, la cual nos hace sentir cómo la madre naturaleza fluye dentro de nuestro toroide, árboles, flores y plantas. La madera nos ayuda a ver y darnos cuenta del mundo tan bello que habitamos y de esta forma nos quedamos en silencio disfrutando de los siete elementos, del heptagrama, y los proyectos de luz que expandimos desde el corazón.
Anexo
Hacer continuamente experimentos con los colores de los círculos de las cosechas observándolos desde el aire ofrece resultados inesperados. En nuestro caso, el científico se puede observar gracias al gran crecimiento de las plantas y al grosor que tenían las plantas al ser doblados sus tallos en el momento en el que fue descubierto el crop circle, que existía un mensaje oculto: que existía una percepción para el ojo humano que podía ser diferente observando las sombras.
5. LA LUNA DEL PASADO Y EL FUTURO
Reportado en Stonehenge, Amesbury, Winterbourne Barrows, Wiltshire, el 7 de julio de 2016
Diámetro: 61 m. / 200 ft
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