Испанский с В. Бласко Ибаньесом. Стена / Vicente Blasco Ibáñez. La pared. Висенте Бласко-Ибаньес
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Читать онлайн книгу Испанский с В. Бласко Ибаньесом. Стена / Vicente Blasco Ibáñez. La pared - Висенте Бласко-Ибаньес страница 6
Veía una ciudad fantástica, con suntuosos palacios como los de los cuentos, brillantes salones de porcelana con espejos que reflejaban millares de luces, hermosas señoras que lucían sus flores; y tal era la intensidad de la imagen, que hasta creía haber visto todo aquello en otros tiempos; tal vez antes de nacer.
En aquel Madrid (в том Мадриде) estaba el señorito (жил: «был» сеньорито), el hijo de los amos (сын хозяев), con el cual había jugado muchas veces siendo niña (с которым /она/ часто: «много раз» играла, будучи ребенком: «девочкой»), y de cuya presencia (и от чьего присутствия) huyó avergonzada el verano anterior (/она/ убежала, в смущении: «смущенная» прошлым летом; avergonzar – стыдить), cuando, hecho un arrogante mozo (когда /он/, ставший статным юношей; hacer – делать; hacerse – становиться; arrogante – высокомерный; статный, ладный), visitó el huerto (зашел в: «посетил» их сад). ¡Pícaros recuerdos (волнующий воспоминания; pícaro – хитрый, нескромный)!
En aquel Madrid estaba el señorito, el hijo de los amos, con el cual había jugado muchas veces siendo niña, y de cuya presencia huyó avergonzada el verano anterior, cuando, hecho un arrogante mozo, visitó el huerto. ¡Pícaros recuerdos!
Se ruborizaba pensando en las horas (она краснела, думая о /тех/ часах; rubor, m – пунцовый цвет, стыд, краска стыда) que pasaron siendo niños (которые /они/ провели, будучи детьми), sentados en un ribazo (сидя: «сидящими» на крутом берегу реки; ribazo, m – холм, крутой берег реки), oyendo ella la historia de Cenicienta (она слушала: «слушая» историю Золушки; ceniza, f – зола, пепел), la niña despreciada (презираемой девочки; despreciar – презирать, пренебрегать) convertida repentinamente en arrogante princesa (внезапно превращенной в прекрасную: «стройную» принцессу).
La eterna quimera de todas las niñas abandonadas (вечная греза всех покинутых девочек; quimera, f – химера, мечта) venía entonces (приходила = возникала тогда) a tocarle en la frente (/чтобы/ дотронуться до ее лба) con sus alas de oro (своими золотыми крыльями).
Se ruborizaba pensando en las horas que pasaron siendo niños, sentados en un ribazo, oyendo ella la historia de Cenicienta, la niña despreciada convertida repentinamente en arrogante princesa.
La eterna quimera de todas las niñas abandonadas venía entonces a tocarle en la frente con sus alas de oro.
Veía detenerse un soberbio carruaje (она видела, как останавливается великолепная карета) en la puerta del huerto (у калитки: «двери» сада); una hermosa señora la llamaba (/и/ прекрасная дама звала ее): «Hija mía (дочь моя)!…, por fin te encuentro (наконец я нашла тебя: «нахожу тебя»)»; ni más ni menos que en la leyenda (точь-в-точь как в сказке: «ни больше, ни меньше, чем в легенде»); después, los trajes magníficos (затем – пышные наряды; magnífico – великолепный, пышный), un palacio por casa (дворец вместо дома), y, al final (и наконец), como no hay príncipes disponibles a todas horas (так как не всегда можно найти принца: «нет принцев в наличии во все часы»; disponer – располагать, иметь в наличии) para casarse (чтобы выйти замуж), se contentaba modestamente (/она/ скромно довольствовалась /тем/; contento – довольный) con hacer su marido al señorito (чтобы выйти замуж за: «сделать своим мужем» сеньорито).
Veía detenerse un soberbio carruaje en la puerta del huerto; una hermosa señora la llamaba: «Hija mía!…, por fin te encuentro»; ni más ni menos que en la leyenda; después, los trajes magníficos, un palacio por casa, y, al final, como no hay príncipes disponibles a todas horas para casarse, se contentaba modestamente con hacer su marido al señorito.
¿Quién sabe (кто знает)?… Y cuando más esperanzada se ponía en el futuro (и когда /она/ совсем погружалась в свое мечты о будущем: «становилась наиболее обнадеженной в будущем»; esperanza, f – надежда), la realidad la despertaba (реальность пробуждала ее) en forma de brutal terronazo (в виде резкого удара комкой земли; tierra, f – земля), mientras el viejo decía con voz áspera (пока = и старик говорил своим грубым голосом):
—¡Arre (эй/давай)!, que ya es hora (уже пора: «час»).
¿Quién sabe?… Y cuando más esperanzada se ponía en el futuro, la realidad la despertaba en forma de brutal terronazo,