href="#fb3_img_img_35dc0a24-8b58-55ed-934f-04ae7ae075e2.png" alt=""/> Cercopiteco verde (Cercopithecus aethiops). Orden: primates. Familia: Cercopithecidae. Nombre en inglés: vervet monkey. Altura: de 40 a 50 cm. Peso: 4 kg. Longevidad: hasta 20 años. Gestación: 7 meses. Número de crías: 1. Depredadores: leopardos, águilas, pitones.
También llamado tota, es un pequeño mono con un pelaje verde grisáceo, una cara negra rodeada de pelo blanco y una cola larga y delgada. Los machos destacan por sus sorprendentes testículos azul fluorescente. Vive en grupos de veinte a treinta ejemplares. Es un animal curioso, inteligente y hábil que puede tener un comportamiento muy familiar con los humanos, como comprobarán los campistas. Para comunicarse entre ellos, utilizan unos sesenta signos y son capaces de emitir casi cuarenta sonidos diferentes.
¿Dónde observarlo? En todas las sabanas y zonas poco arboladas, también fuera de los parques.
Felinos
Con sus orejas coronadas por un largo penacho de pelos negros, el caracal es conocido como el lince africano. Se caracteriza por unas patas largas, un cuerpo esbelto y una cola corta. El pelaje es de color marrón rojizo pero se vuelve blanco en el vientre y la garganta. El caracal es capaz de adaptarse a muchos ambientes, pero prefiere la sabana seca y las regiones semiáridas. Excelente cazador, repta en silencio, acecha en las sombras antes de saltar sobre su presa, a la que degüella con sus colmillos. Roedores, pájaros y antílopes jóvenes son sus platos favoritos, e incluso se atreve con animales mucho más grandes que él. Solitario como la mayoría de los felinos, solo vive en pareja durante la temporada de celo.
¿Dónde observarlo? En el Parque Nacional del Valle de Kidepo.
Presente de norte a sur en el continente, el gato montés africano (subespecie del gato montés) fue domesticado por los egipcios más de 2500 años antes de nuestra era y es el origen de todas las razas de gatos domésticos de pelo corto. Su parecido con el gato doméstico atigrado es sorprendente, aunque el gato montés tiene un aspecto general más robusto y presenta trazos rojizos detrás de las orejas. Se alimentan de pequeños mamíferos, reptiles, aves y a veces de insectos. Viven solos, excepto durante la época de apareamiento hasta que la hembra da a luz a los cachorros. Al igual que su pariente europeo, el gato salvaje africano se aparea también con el gato doméstico cuando está cerca de un hábitat humano, lo que probablemente es la mayor amenaza para la integridad de la especie.
¿Dónde observarlo? En parques y reservas de sabana.
También llamado chita, el guepardo es famoso por su velocidad de carrera. De hecho, es el animal más rápido, ya que es capaz de alcanzar velocidades de más de 110 km/h en distancias cortas. A diferencia de otros felinos, sus garras no son retráctiles. Su cabeza es redondeada y fácilmente reconocible por sus dos líneas negras que parten del lagrimal hasta la comisura de los labios. Su esbelto cuerpo se apoya en largas y delgadas patas. Su gañido es fácil de reconocer entre todos los demás porque se parece mucho al de algunas aves. Finalmente, aunque mide unos 80 cm a la cruz, su tamaño real llega hasta casi 90 cm gracias a una cresta de pelos retráctiles que cubre los hombros y el cuello. A este carnívoro, que es tanto diurno como nocturno, le gusta cazar, tanto al amanecer como cuando cae el sol, en grandes llanuras abiertas. Su técnica de caza se basa esencialmente en su velocidad de carrera. El guepardo no se esconde, caza a plena vista, localiza a su presa, la persigue durante una distancia inferior a 400 m, la adelanta gracias a su velocidad y luego la desequilibra con sus patas delanteras. La muerte llega por estrangulamiento y no devora a la presa en el momento, sino que la arrastra. La dieta principal del guepardo consiste en antílopes de tamaño mediano, pintadas, avutardas, conejos y a veces animales domésticos. Este último aspecto, combinado con la feroz competencia alimentaria que tiene con leones, hienas, perros salvajes e incluso buitres, es responsable de su gradual extinción. De hecho, al cazar a la vista y acercarse a sus presas al descubierto, se convierte en un blanco fácil para los cazadores en busca de trofeos. El guepardo forma parte de la triste lista de especies animales en peligro de extinción.
¿Dónde observarlo? Solo en el parque de Kidepo.
Aunque es bastante común, el leopardo es uno de los animales más difíciles de observar. Es el felino con más secretismo de África. Muy arisco, pasa el día a la sombra, tumbado sobre una rama, y sale únicamente al anochecer. La dieta de este carnívoro es muy variada: pequeños antílopes, insectos, peces, reptiles, aves, damanes y a veces también animales domésticos. Se ha esparcido el rumor persistentemente de que los babuinos son una de sus presas más comunes, pero esto no es cierto. Aunque a veces, al caer la noche, ataca a algún babuino aislado, el leopardo nunca se aventurará contra un grupo constituido, donde se arriesgaría a enfrentarse con los machos dominantes, unos depredadores ágiles y excelentes escaladores, equipados con colmillos temibles y con una fuerza extraordinaria. Para poner a buen recaudo sus presas y evitar que otros carnívoros (leones, hienas, perros salvajes) se las roben, el leopardo las sube a los árboles. Es capaz de transportar presas de hasta 110 kilos con su boca.
¿Dónde observarlo? Está presente en la mayoría de los parques de Uganda, pero es más probable encontrarlo en las riberas del canal Kazinga (Parque Nacional Queen Elizabeth).
El rey de los animales es también el más grande de los felinos. El color de su pelaje varía de marrón rojizo a marrón rojizo más oscuro, mientras que el vientre es siempre más claro. Exclusiva de los machos, la melena que los protege de las mordeduras en el cuello durante las peleas y les confiere ese aspecto tan imponente, comienza a crecer alrededor de los dieciocho meses para alcanzar su tamaño final a los cuatro o cinco años. Los leones son animales sociables que viven en grupos de hasta treinta ejemplares (generalmente quince). Aunque pasan veinte horas al día durmiendo (de ahí su fama de perezosos), los machos mantienen la cohesión del grupo, delimitan y defienden el territorio, ayudan a las leonas en la caza mayor y vigilan las presas capturadas. Atacan con más frecuencia a antílopes de tamaño medio o a cebras. A veces (especialmente cuando están en grupo), atacan a animales más grandes, como búfalos, jirafas o elefantes.
