REFORMA POLÍTICA SISTEMA PARLAMENTARIO PRIMER MINISTRO. Walter Huggias
Чтение книги онлайн.
Читать онлайн книгу REFORMA POLÍTICA SISTEMA PARLAMENTARIO PRIMER MINISTRO - Walter Huggias страница 3
Tenía y tengo, objetivos técnicos jurídicos en el proceso político y constitucional, que quiero cumplir.
Al escuchar el mensaje del Presidente de la Nación, recién llegando a Remedios de Escalada, visualicé la severidad de la “cuarentena”, que además ya era algo conocido y/o escuchado, como política sanitaria, por supuesto que en otros siglos o en otros continentes lejanos. Reaccioné así, me dije: estamos ante otra crisis, a lo económico y social se suma la pandemia. Lamentablemente no me equivoqué.
Me obligué, voy a buscar todo aquello escrito, que quedó muy bien archivado, desde tanto tiempo.
Así es, este trabajo literario y de estudio, comenzó hace años, al menos en parte de su fundamentación.
Había realizado estudios políticos sobre la reforma constitucional de 1994, los que me conocen, saben de mis diferencias, con el modelo político; económico y social que quedo en la ”Carta Magna”, a partir de la rigidez del sistema de funcionamiento de los poderes y sostener la imposibilidad de reformas parciales, con el sistema de enmiendas.
Nunca entendí en su totalidad, el espíritu de aquella reforma constitucional, en nuestro país, en vías de desarrollo y evolución, sin la posibilidad de enmiendas, sin comparaciones externas, no las necesito, solo por los requerimientos propios.
He expresado sobre la necesidad de reformas, sin la urgencia actual, valorando algunos institutos; nuevos derechos y organismos democráticos incorporados.
A qué tuvieron miedo? tantas precauciones, vuelvo una y otra vez a esta pregunta.
La solución es institucional; al pasar los días consolidé la idea. Especialmente cuando me llego la imagen de amplitud política y partidaria para asumir la administración de la pandemia en Argentina. Necesitamos dinámica y elasticidad, volvió aquella imagen del Parlamentarismo, del Primer Ministro.
Desde cada opción, en ponencias, siempre que pude y ameritaba, manifesté que necesitamos un sistema moderno y exigente para el poder de turno, también en charlas, debates o reuniones académicas.
Todo comenzó a fluir en ese día 19, mientras demoraba en abrir un sobre con documentos (nunca lo hice con tanta prolijidad, la mente se prepara para el autocontrol, para la paciencia del aislamiento -concedí-), tarde-noche que lógicamente se trasladó al día 20 del 03, como tantos otros ciudadanos de Argentina, la necesidad de información y la expectativa, me llevó a dormir muy tarde, ya casi de madrugada.
Confieso que ante la complejidad e incertidumbre, pude disfrutar de mi cumpleaños, ya tenía mis regalos además de un gran almuerzo con mi hijo, haber incorporado una expectativa adicional, donde aprovechar lo que vendría. Casi todos sabíamos que sería mucho más que 40 días, era ineludible y razonable. Tengo un obsequio agregado, de los mejores porque llega a nuestro pensamiento, apareció un objetivo, pensé es el momento, allá voy, los días sucesivos y los eventos políticos e institucionales ocurridos que describiré, mas las comparaciones con un pasado, muy presente, hicieron el resto.
Muchas gracias, infinitas gracias, por ocuparse de estos temas, abordados con estas palabras.
Introducción
En distintas etapas de este trabajo, veremos momentos históricos en los que trataré de fundar la necesidad de aplicar este sistema de administración del poder ejecutivo en la estructura constitucional y política de Argentina.
Pero sin duda alguna, quiero compartir con todos aquellos que se internen en estas aguas complejas en busca de la novedad, que ordené los procesos a desarrollar, que la pandemia originada en el virus denominado “COVID-19”, es la máxima razón que me impulso a concretar esta presentación.
Digo concretar, porque ya tenía etapas de estudio anteriores, partes desarrolladas con información en territorio durante la otra gran crisis en 2001; 2002 y 2003, donde debemos recordar que los acuerdos del Dr. E. Duhalde y el Dr. R. Alfonsín, peronistas y radicales, resultaron fundamentales y providenciales para superar aquella crisis. Solucionaron profundos problemas en las esferas: económica, política y social, de proporciones que aún hoy, no han sido dimensionadas, con secuelas de todo orden por décadas.
Solo lo superó el sistema político y voy a sostener mi propuesta, se actuó como en un régimen parlamentario, entonces y de nuevo ahora 2020. Sin perjuicio de considerar la extrema necesidad de aquel tiempo y la elogiosa actitud de los líderes, nuevamente entendiendo el momento histórico, un conjunto de ciudadanos, se activó asociativamente y comprendió la necesidad de un acuerdo político nacional sólido, como para comenzar la reorganización.
No me voy a extender en lecturas históricas y/o análisis de aciertos; errores de los participes inmediatos y posteriores de aquella gesta, ya hablaré luego de experiencias personales en ese contexto y también algunas circunstancias que emergen muy interesantes realmente, pero lo verdaderamente aplicable en este proyecto, es que fue una exitosa actuación política, que se precipitó en el Parlamento, con la elección como “Primer Mandatario” de un Senador Nacional. Dio respuesta la política, como sistema y la metodología, fue de “Primer Ministro”, con gabinete consensuado entre las principales fuerzas con representación parlamentaria y actuó, el titular del ejecutivo nacional en mi opinión, como primer ministro parlamentario, con un gabinete de consenso, muy competente, con destacadas figuras de ambos partidos políticos, peronistas y radicales.
Nada menos, se salvó la República.
La historia vuelve a repetirse, con resultados asimilables, semejantes, en efecto, durante el comienzo de la crisis sanitaria,19/20 de marzo 2020, antes incluso, 12 de marzo, al reconocer la emergencia, luego de la Declaración de la “Organización Mundial de la Salud”, ya me ocuparé de ese cronograma de hechos y actos internacionales, posteriormente quizás abril de 2020, mas claramente, pude visualizar y seguramente Ustedes también, que el aparato político,mayoritario,rápidamente entendió la magnitud del problema, la calidad diferente de la amenaza, con otras del pasado reciente (2009/10 –Influenza -gripe A) y los daños a evitar y/o morigerar.
No voy a hacer tempranas evaluaciones sociológica, sobre la pandemia actual, es de alta complejidad y todo resultado es parcial, ya que lejos esta de mi voluntad iniciaría, pero no puedo obviar la circunstancia que apareció un espectro político, como unidad de acción, absolutamente impensado, oportuno y sorprendente.
Cuando hablo de sorpresa, me refiero a algunos aspectos, es indicativo, ojalá puedan agregar muchos más, que para sistematizar, enumeraré:
1 Los alineamientos políticos de sectores antagónicos hasta unos días antes (es sabido que se estaba comenzando una dura negociación por el recorte de la coparticipación forzada, otorgada durante el gobierno 2015 /2019 a CABA –solo como ejemplo, hay muchos más en toda la geografía nacional) cuando comenzamos a ver al Sr. Jefe de Gobierno porteño y otros opositores con responsabilidad de administración efectiva en territorio, entendiendo con positiva habilidad; sentido político y social, lo que sucedía y donde debían colocar su posición defensiva ante el ataque epidemiológico.
2 El gobierno nacional que comenzaba a buscar su rumbo, acechado por una crisis financiera y se descubre eficiente, donde muchos otros líderes mundiales dudaron (sin ánimo alguno de establecer innecesarias comparaciones, los argentinos, tenemos muchas cuentas pendientes desde el desorden