Luz Nocturna. Amy Blankenship
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â¿Quién es el hombre que está con Kat?â, preguntó Quinn cuando Warren terminó con su intercomunicador.
Warren se volvió a ver al ex novio de Envy. Pensó que Kat le estaba diciendo a Trevor que Envy ya no estaba disponible, lo cual era una buena idea, porque sin el bombón de Trevor en el bar, tal vez el investigador paranormal se irÃa a investigar a otro lugar.
âEso es sólo el masoquista local al que le gusta ser atacado por mujeres atractivas con pistolas eléctricas.â Warren se rió burlonamente de su propia broma. Cuando Quinn no sonrió, hizo que de repente extrañara el asociarse con Michael. Se preguntó si era demasiado tarde para cambiar de pareja, pero luego se quitó la idea de la cabeza. Quinn y Kane juntos serÃa un desastre en potencia.
Trevor sintió que alguien lo miraba y miró de reojo hacia la puerta. Apenas logró que la sorpresa no se notara en su cara cuando vio a Quinn Wilder con Warren Santos. Si no hubiera sospechado lo que hizo, Trevor creerÃa que los dos estaban involucrados en los asesinatos y estaban planeando su próximo paso. Pero esa lÃnea de pensamiento estaba reservada para los burros idiotas de la policÃa local.
â¿Qué hace aquà el dueño del Night Light?â, Preguntó Trevor volviéndose hacia Kat.
âTodos estamos tratando de arreglar el problema con los vampirosâ, dijo Kat mientras sus ojos se clavaban desafiantemente en los de Quinn. Oh cielos, parecÃa un poco desconcertado. Sólo para probar la teorÃa, ella se inclinó más cerca de Trevor como si estuviera susurrando cosas lindas en su oÃdo, â¿Tienes alguna arma que podamos usar para emparejar las cosas?â Ella guiñó un ojo sabiendo que acababa de ganar un socio para esa noche.
Trevor lo pensó por un momento, haciendo una lista mental de lo que tenÃa en su cajuela.
âSÃ, tengo algunas cosas en el autoâ, aceptó Trevor. âPuede que tengamos que regresar a mi casa para traer algunas otras cosas que tengo escondidas en mi caja fuerte.â
âPerfectoâ, pensó Kat para sà misma.
Mientras Warren y Quinn pasaban por delante de la barra, Warren se distrajo de nuevo con el intercomunicador que sonaba en su oÃdo. A Quinn no le importó el retraso. Le dio un momento para averiguar qué estaba pasando con la feliz pareja en el bar.
Kat vio que Quinn venÃa y se movió rápidamente para que Trevor no pudiera oÃr y Quinn no pudiera arruinar su plan.
Al tratar de alcanzar una botella, se dio la vuelta para encontrar a Quinn de pie entre ella y el bar.
â¿Puedo ayudarle, señor?â preguntó Kat con una ceja arqueada sarcásticamente. âSabes que no se permiten clientes detrás de la barra.â
Quinn dio un paso hacia ella a pesar de que ya estaba bastante cerca. Colocó una mano en el estante al lado de su brazo, dejándola atrapada donde estaba. Al ver sus ojos tratando de mirar por encima de su hombro al hombre con el que habÃa estado hablando... Quinn gruñó, âNo te distraigas esta noche Kat. Te estoy advirtiendo. El hecho de que no vengas con nosotros a cazar no significa que un vampiro no pueda entrar por la puerta de este bar.â
Kat suspiró sabiendo que ese era el truco más antiguo del libro. Hacer que alguien piense que es importante dándole un trabajo extra que sea seguro. âEstaré bienâ, le dijo mientras se agachaba para pasar bajo su brazo e irse hacia donde Trevor de nuevo. âY si necesito algo, ya tengo a alguien dispuesto a dármelo.â Esto lo dijo con una pizca de seducción en su voz. Era mentira, pero Quinn la habÃa hecho enojar.
Ella sonrió interiormente sabiendo que Quinn pensaba que querÃa decir sexualmente y Trevor pensó que querÃa decir en la caza de vampiros esta noche. Warren escogió ese momento para terminar y hacerle saber a Quinn que ya estaba listo para marcharse.
Quinn apretó sus labios mientras se acercó a Kat y se inclinó, casi rozando sus labios contra su oreja, âQue tengas una noche seguraâ. Ãl pudo ver, con cierta satisfacción, como a ella se le ponÃa la piel de gallina en todo su cuello y en su hombro.
Kat se agarró al borde de la barra cuando sintió que sus rodillas se debilitaron. Logró estabilizarse y saltó cuando oyó la voz de Michael justo detrás de ella.
âTen cuidado con la fuerza con que tiras de la cola de ese gato, amorâ, le recordó Michael, luego hizo señas con la cabeza a Trevor antes de ir a encontrarse con Kane en el techo.
Trevor frunció el ceño ante la mirada sobresaltada de Kat. â¿No era eso acaso un vampiro?
âNo, eso era un caballero y nos está ayudando a rastrear a los verdaderos monstruosâ, dijo Kat con seguridad mientras añadÃa silenciosamente, y él es el único que no hizo un alboroto de que yo saliera esta noche. âSin embargo, parece que nos estamos quedando atrás. ¿Estás listo para salir?â
*****
Kane caminaba de un lado a otro en el techo, fumando un cigarrillo y de vez en cuando sacudiendo sus brazos. Estaba empezando a sentirse ansioso esperando que Michael apareciera.
âJaguares y pumasâ gruñó. âSon peores que los gatos domésticos. Todos tienen que dominar a los demás. Prefiero unirme a los Coyotes que lidiar con estoâ.
Michael se acercó al borde de la azotea justo detrás de Kane, atrapándolo en medio su agitado discurso. Frunció el ceño cuando Kane se calló de inmediato y miró hacia un lado al darse cuenta de su presencia.
âMaldita sea Kane, ¿vamos a hablar de lo que te molesta o no?â, preguntó Michael mientras se acercaba a él.
âO noâ, respondió Kane.
âBienâ, Michael esperó sabiendo que Kane odiaba más la del silencio que discutir. Le encantaba cuando él tenÃa razón.
Kane caminó hacia el borde del edificio, alejándose de nuevo. HabÃa olvidado cómo Michael podÃa aparecerse frente a él de repente... hacÃa ya mucho tiempo que eso no pasaba. âRaven parecÃa un poco decepcionado porque faltaba parte de su ejército en el almacén... algunos de sus locos estaban desaparecidos. Supongo que los vampiros que se perdieron nuestra pequeña fiesta de la muerte probablemente necesitaban un lugar donde pasar el dÃa, asà que voy a revisarâ.
Michael no dijo una sola palabra cuando Kane volvió a caer desde techo y aterrizó en el pavimento abajo. Justo cuando se acercó al borde dispuesto a hacer lo mismo que Kane hizo, algo en el tejado al otro lado de la carretera llamó su atención.
Volviendo su mirada hacia allá, Michael vio por un instante una sombra que luego desapareció. Algo acerca de esa sombra le