Cara a cara con Satanás. Teresa Porqueras Matas

Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу Cara a cara con Satanás - Teresa Porqueras Matas страница 11

Cara a cara con Satanás - Teresa Porqueras Matas Apostroph Ensayo

Скачать книгу

ahora acabamos, es que me gustaría que me contase algo más de este caso. No sabe cuánto me intriga.

      El dominico aprieta los labios y se hace un incómodo silencio.

      —¿Ella nota algo dentro?

      —Prefiero no...

      Mi tenacidad no permite que dejemos el tema y con insistencia lastimera le pregunto:

      —Pero... ¿ha hecho ella algo para estar así?

      —Ella no sabe nada.

      —¡Pero algo habrá hecho para estar así...! —exclamo al dominico.

      —No, no ha hecho nada... Es que a veces buscamos la causa. Y hay multitud de posibilidades y en ocasiones no hay ninguna que esté influyendo. ¿Entiendes a lo que me refiero? —me aclara el exorcista.

      —En Memorias de un exorcista se cuenta como el padre Gabriele Amorth habla con el demonio, le pregunta su nombre... Incluso cuenta que en ciertas ocasiones el demonio revela el día que abandonará el cuerpo... ¿Eso no puede servir de ayuda en este caso, padre? —pregunto curiosa.

      —Ya. Bueno...

      Entiendo que el proceder de Gallego no es el mismo que el de Gabriele Amorth. Con razón aquí podríamos utilizar el dicho: «Todo maestrillo tiene su librillo», por ello me interesa indagar en cómo el dominico actúa en cada caso, cómo piensa y ejerce. Cuál es su proceder.

      El exorcista, dada mi insistencia, dice:

      —Pues perdona que no te quiera dar detalles pero entiende que...

      —Comprendo que no me pueda hablar de ello de forma pormenorizada... ¿Podríamos planificar el siguiente encuentro?

      Quedamos el día 23 de enero a las diez de la mañana.

      —Para entonces ya me habré leído todo lo que me ha entregado y tendré el material más estructurado, que su vida tiene tela...

      El reverendo padre sonríe. Coge su agenda y en lápiz apunta «Teresa » en el día 23 de enero de 2016.

      El clima está más distendido que durante la entrevista y, mientras nos levantamos, tartamudeando en voz baja me decido a preguntarle una vez más:

      —¿Y...y...y... esa señora habla otras leguas, o no?

      —Algunas palabras sueltas.

      —¿Y no es consciente de ello?

      —Depende, no es la cosa tan... Cada caso es distinto, no hay dos iguales, Teresa.

      —Pero se debe de insistir, insistir... ¿No cree?

      —A veces insistes y no consigues nada porque además, fíjate, que aquí hay dos cosas. Una, son los movimientos, y la… eso que se te pone. Y yo estoy convencido de que esos movimientos continúan después cuando ya no hay influencia demoníaca. Porque el demonio lo que busca es apartarnos de Dios y si él ya no está allá, a pesar de eso, busca e intenta. O sea que una persona no está curada por el simple hecho de que ya no tenga movimientos de esos. El otro día un psiquiatra decía que hay ciertas cosas en esto, que tiene tanta fuerza... que tiene una fuerza realmente exorbitante.

      —Pero esta fuerza que dice usted, ¿aparece solo cuando se está poseído?

      —No. También puede darse cuando no están poseídos. Hay ciertas zonas de la parte de aquí (y se señala la cabeza) que tocándolas explotan, por decirlo de alguna manera. Para mí la posesión es apartarnos de Dios, pero si una persona empieza a cumplir, y se propone hacer todas las cosas..., ahí entonces ya no hay posesión. Pero muchas veces no funciona y sigue actuando a pesar de todo... Los fenómenos son secundarios. Además, hay determinadas enfermedades que dan esos mismos síntomas, pero sin haber ningún demonio. ¿Te das cuenta de lo que quiero decir?

      —Interpreto que no es fácil determinar claramente cada caso...

      —¿Quieres que tomemos un café?

      Salimos del convento y acudimos a una cafetería cercana. Allí había mucho bullicio y estuvimos hablando de temas superfluos. También se interesó por mí, por mi familia, por mi trabajo, y otras cuestiones banales, nada que ver con posesiones, poseídos y almas en pena.

      Habrá que esperar hasta la próxima visita, el día 23 de enero; un nuevo año que bien seguro aportará nuevas historias por descubrir.

      3. Empezamos el año

      En un abrir y cerrar de ojos nos hemos instalado en un nuevo año. En estos gélidos primeros días del mes de enero ando revisando el material documental que me ha ido proporcionando el dominico, al tiempo que hago acopio de más datos sobre su vida y trayectoria. Deseo empaparme de la máxima información antes de nuestra próxima entrevista a mediados del mes de enero en Barcelona, una ciudad emblemática que arrastra consigo la herencia de conocidos exorcistas como Antonio Mª Claret (1807-1870), Mosén Cinto Verdaguer (1845-1902) o Joaquín Mª Piñol y Plana (1834-1907).

      1 La Orden de Predicadores está integrada por «partes» que gozan de una cierta autonomía administrativa y de personalidad jurídica propia. Estas partes son las llamadas «provincias», al frente de las cuales están el capítulo provincial y el prior provincial. Las provincias fueron creadas por el Capítulo General o autoridad suprema en 1221.

      La creación de la nueva Provincia Hispania es, sin duda, un momento histórico para todos los dominicos, que coincide en el tiempo dentro de los actos de celebración del Jubileo 800 de la Fundación de la Orden de Predicadores, fundada por Santo Domingo de Guzmán.

      Lamentablemente, y debido a cierta indisposición sufrida por su reciente operación, Gallego, en el último momento y muy a pesar suyo, tuvo que suspender el viaje y se vio obligado a declinar la invitación a tan significativo evento, por lo que tuvo que seguir todo lo que ocurrió en Santo Domingo de Caleruega desde su Convento de Santa Catalina de Barcelona.

      4. Con los deberes hechos

      Tanto era mi afán por reencontrarme con el padre Gallego, que parece

Скачать книгу