La manifestación de la velocidad de desplazamiento en el tenis. David Suárez Rodríguez
Чтение книги онлайн.
Читать онлайн книгу La manifestación de la velocidad de desplazamiento en el tenis - David Suárez Rodríguez страница 7
A la hora de preparar a un tenista, conviene tener en cuenta que la capacidad para acelerar y para alcanzar una velocidad máxima no tiene una relación lineal. También parece que la aceleración y la capacidad de mantener altos niveles de velocidad son bastante independientes (Zhelyazkov, 2001). Sin embargo, la capacidad de mantener altos rendimientos al realizar aceleraciones sí que tiene una fuerte relación con la destreza en las mismas y con la fuerza explosiva y la explosiva elástica. A mayores niveles de fuerza explosiva, más capacidad para retrasar la fatiga ante este tipo de estímulos (García Manso, 1999).
Esta aceleración depende directamente de una alta sensibilidad del sistema nervioso, y tiene una íntima relación con el estado emocional. La capacidad de manifestar un gradiente de fuerza elevado y una aceleración explosiva del cuerpo va unida al máximo flujo de impulsos nerviosos. Entonces podemos suponer que el sistema neuromuscular, con sus procesos aferentes y eferentes desde el sistema nervioso central a las placas motoras, tendrá una relevancia capital en la velocidad. También tiene una relación directa con la técnica, por tratarse de acciones que deben tener un alto grado de precisión y coordinación, y de esta forma alcanzar un elevado rendimiento. Para ello, por ejemplo, se debe buscar un elevado número de apoyos para lograr un buen número de momentos de fuerza, pero logrando al mismo tiempo unos impulsos óptimos.
Al producirse continuas aceleraciones y desaceleraciones, los procesos activadores y los inhibitorios resultarán fundamentales. En todo proceso de carrera, especialmente a elevada intensidad, se debe producir una coordinación precisa entre la tensión y la relajación de los agonistas y antagonistas, pero en el caso del tenis se presenta además una continua alternancia de tensiones, relajaciones y diferentes tipos de tensión concéntrica y excéntrica, con componente elástico y reflejo. La fuerza excéntrica y de ciclo estiramiento-acortamiento se manifestará, especialmente, en las acciones de frenada y cambio de dirección o sentido. No se trata solo de relajar, sino de realizar fuerzas excéntricas explosivas con una absorción de la velocidad alcanzada en la aceleración. Todo esto implica a la técnica como elementos de ejecución, de fluidez, de control motor, del tiempo, del espacio y del ritmo.
La relación con la fuerza es determinante, pero cuanto más rápida es la acción menor tiempo de aplicación de la misma se tendrá. Las velocidades segmentarias se incrementarán, el tiempo de apoyo o impulso se reducirá y habrá una mayor dependencia de la capacidad de realizar fuerza explosiva en un breve espacio de tiempo, pero también en movilizar a altas velocidades los brazos y piernas. Por lo tanto, se tratará de una fuerza explosiva con la carga corporal del tren inferior al impulsar, pero también en la movilización de porciones del cuerpo, como los brazos o la flexión de la cadera.
Por lo tanto, se producirán unas subsituaciones de aplicación de fuerza dentro del desplazamiento global, dependientes de diferentes factores. Esto será así, tanto en la salida como en la aceleración y desaceleración, en esta última fase con una importante acción excéntrica de frenada también en unas subsituaciones similares a las presentes en la aceleración, pero para el ajuste con la pelota y su golpeo.
Se trata de una velocidad global, por participar diferentes elementos corporales dependiendo, en parte, de la eficacia coordinativa en la preparación y acción de golpeo, y con decisiones cognitivas. Por lo tanto, se sucederán y sobrepondrán acciones cíclicas de desplazamiento con acíclicas de ajuste y golpeo.
El sistema de juego y el carácter del jugador influirán también en el tipo de desplazamiento: por ejemplo, cuando se trata de jugadores ofensivos que dominan el punto y el centro de la pista, sus movimientos, en muchas ocasiones, serán cortos, manifestándose la velocidad en el juego de pies y la rapidez gestual, en íntima relación con la ejecución del golpe ofensivo. Sin embargo, cuando se trata de un jugador o una situación de carácter defensivo, el recorrido del desplazamiento es mayor en cada aceleración y en valores totales en cada punto. Esto se acentúa si la posición defensiva es retrasada, lo que incrementa el ángulo del oponente y el espacio a recorrer por el jugador. Otra diferencia será que al estar en defensa los apoyos finales concluirán con un paso largo abriendo la posición de golpeo, y con deslizamiento si se está jugando sobre tierra. Sin embargo, en situación de ataque los pasos son más cortos con posiciones más laterales. En cualquier caso, los pasos iniciales para buscar apoyos rápidos y finales para ajustar la distancia con la pelota, deben intentar realizarse cortos y con apoyos estables. Estos roles serán determinados por el sistema de juego de cada tenista, pero también se podrán alternar durante el partido y durante cada punto, pasando de una situación de dominio con sus características motoras, a una de defensa con las suyas propias o, por el contrario, pasar de la defensa al ataque.
Por lo tanto, estaremos hablando de situaciones complejas donde la manifestación de la velocidad se producirá de forma variable, con diferentes tipos de acciones interconectadas frente a situaciones cambiantes e incluso inesperadas, lo que determinará el tipo de reacción y de movimientos en un partido.
Tabla 2–2Unidad o ciclo de juego y tipo de velocidad según la cantidad de movimientos
ACCIÓN ACÍCLICA SALTO PARADA → ACCIÓN CÍCLICA ACELERACIÓN → ACCIÓN CÍCLICA DESACELERACIÓN-COLOCACIÓN Y GOLPEO → ACCIÓN ACÍCLICA GOLPEO → ACCIÓN CÍCLICA ACELERACIÓN LATERAL → Posible repetición |
Las unidades o ciclos de juego reflejadas en la tabla 2-2 se producirán de forma compleja con diferentes acciones relacionadas presentadas simultáneamente o enlazadas. Resulta importante señalar que se produce una toma de decisiones inmediatamente después del salto, pero que puede realizarse también durante el mismo, incluso llevarse a cabo decisiones anticipatorias previas al salto durante la fase de recuperación o aceleración lateral, o cuando se recupera la posición hacia atrás desde una situación dentro de pista. El ciclo puede no ser entero dependiendo el punto, en ocasiones, de una manifestación muy breve, casi inmediata, con solo la puesta en acción de colocación tras una reacción muy rápida.
Figura 2-4 Pere Riba. Se producen situaciones de transición o de lucha por el dominio en la jugada. En otros casos no cabe duda, la situación en la pista y la buena situación de piernas determinarán en gran parte el rol inmediato.
Estas unidades pueden ser diferentes según se produzcan en situación de ataque, de defensa, de transición, neutra, o en combinación de varias, requiriéndose un tipo de desplazamiento, unas distancias recorridas, una intensidad, un gradiente de aceleración y desaceleración, según sea uno u otro el rol del jugador. También habrá un mayor o menor interés por jugar en uno u otro rol según sean las características del jugador: su carácter, sus golpes, su planteamiento de partido (fig. 2-4). Básicamente podemos distinguir los roles en tres tipos básicos:
■Rol neutro:
•Juego muy centrado con pocas angulaciones.
•Puede haber gran potencia e intensidad (coger la pelota alta o cuando sube).
•Puede haber profundidad.
•Se está detrás de la línea.
•Puede haber objetivo de esperar el fallo del oponente.
•Puede haber objetivo de provocar el fallo del oponente.