Reglas insensatas. Freddy Escobar Rozas
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Como afirma Welch:
Strategy [is] not a lengthy plan. It [is] the evolution of a central idea through continually changing circumstances (…) Any cookbook approach is powerless to cope with the independent will, or with the unfolding situations of the real world (Freedman, 2013, p. 504).
4. APLICACIÓN LEGAL
El sistema legal tiene un objetivo fundacional: preservar la cooperación pacífica de los integrantes del grupo social56.
Para alcanzar ese objetivo, el sistema legal requiere enfrentar y resolver dos tipos de desafíos, a saber: (i) desafíos valorativos y (ii) desafíos funcionales.
Los desafíos valorativos exigen responder de manera positiva a los requerimientos de naturaleza política, económica y moral del grupo social (p.e. ejercicio de las libertades, creación de riqueza, redistribución de riqueza, solución pacífica de conflictos)57. El grado de satisfacción de dichos requerimientos constituye una función de la aceptación del ideal de cooperar en paz58.
Los desafíos funcionales exigen desarrollar los atributos necesarios para prevalecer frente a otros “sistemas normativos” (p.e. religión, moral): (i) coherencia; (ii) universalidad; (iii) inmunidad; y, (iv) adaptabilidad. El grado de eficacia de dichos atributos constituye una función de la eficacia del sistema en cuestión.
¿Cómo enfrenta el sistema legal los desafíos valorativos y funcionales?
El sistema legal enfrenta cada desafío valorativo a través de la construcción de un conjunto de reglas dirigido a la satisfacción de las necesidades que explican tal desafío. Por ejemplo, para resolver de forma satisfactoria el desafío vinculado a la creación de riqueza, el sistema legal construye un conjunto de reglas en torno al “principio de autonomía privada” (derecho contractual); mientras que para resolver de forma satisfactoria el desafío vinculado a la redistribución de riqueza, el sistema legal construye un conjunto de reglas en torno al “principio de capacidad contributiva” (derecho tributario)59.
El sistema legal, por otro lado, construye diversas herramientas “ad-hoc” dirigidas a resolver de modo satisfactorio los desafíos funcionales que se presentan. Veamos en qué consisten esas herramientas60.
La coherencia exige que el sistema legal se encuentre conformado por normas que no generen “respuestas incompatibles”. ¿Qué herramientas emplea el sistema legal para ser coherente? En términos generales, ese sistema emplea tres herramientas: (i) interpretación; (ii) jerarquía; y, (iii) especialidad. La primera herramienta establece reglas interpretativas que intentan erradicar los significados contradictorios de las normas. La segunda herramienta establece (a) que la norma constitucional prevalece sobre la norma legal; y, (b) que la norma legal prevalece sobre la norma reglamentaria. La tercera herramienta establece que la norma especial prevalece sobre la norma general. El empleo de estas tres herramientas permite, al menos en teoría, suprimir las contradicciones internas del sistema legal. De este modo, este sistema ofrece soluciones confiables y, por lo tanto, desincentiva el empleo de los sistemas alternativos.
La universalidad exige que el sistema legal se encuentre conformado por normas que generen respuestas para todas las situaciones legalmente relevantes. ¿Qué herramienta emplea el sistema legal para ser universal o completo? En términos generales, dicho sistema emplea la herramienta de la analogía. Esta herramienta permite aplicar la Regla 1 prevista para la situación regulada Xa (“SR”) a la situación no regulada Xb (“SNR”). De este modo, el sistema legal ofrece respuestas para todas las situaciones (reguladas y no reguladas) y, por lo tanto, desincentiva el empleo de los sistemas alternativos.
La inmunidad exige que el sistema legal se encuentre conformado por normas que no sean vulnerables a ataques subversivos, esto es, provenientes desde el interior del propio sistema. ¿Qué herramienta emplea el sistema legal para ser inmune? En términos generales, dicho sistema emplea la herramienta de la prohibición del fraude. Esta herramienta permite impedir que la acción X se realice al amparo de la letra de la Regla 1 (“regla de cobertura”) si es que vulnera la ratio legis de la Regla 2 (“norma defraudada”). De este modo, el sistema legal elimina el riesgo de ataques subversivos o internos, ofrece seguridad y certeza y, por lo tanto, desincentiva el empleo de los sistemas alternativos.
La adaptabilidad exige que el sistema legal responda a los cambios de los desafíos valorativos de forma eficiente, sin necesidad de poner en marcha el complejo proceso que supone aprobar modificaciones normativas. En otras palabras, la adaptabilidad exige que el sistema legal responda de manera satisfactoria, con las mismas normas, los requerimientos sociales en contextos marcados por los cambios de paradigmas. ¿Qué herramienta emplea el sistema legal para ser adaptativo? En términos generales, ese sistema emplea la herramienta de los estándares61. Esa herramienta establece que el criterio legal aplicable ha de ser fijado, no ex ante, sino ex post, a través de la “interpretación valorativa” del operador legal. Por lo tanto, este operador puede definir el criterio en cuestión en función de los requerimientos valorativos vigentes, tomando en consideración los cambios de paradigmas experimentados una y otra vez por la sociedad. De este modo, el sistema legal se protege contra el riesgo de obsolescencia, ofrece “sensibilidad” y, por lo tanto, desincentiva el empleo de los sistemas alternativos.
5. LÍMITES
En teoría, la herramienta de la interpretación puede eliminar los significados de las normas legales que eventualmente presenten contradicciones, disonancias, etc. En realidad, sin embargo, esa herramienta tiene serias limitaciones funcionales por distintas razones.
Primera: la interpretación es una actividad que se proyecta sobre los conceptos. Y, como hemos visto, estos últimos son, por definición, imprecisos y ambiguos. Por tal razón, la interpretación es contextual, cambiante, variable, flexible. Estas características impiden la eliminación uniforme de las contradicciones internas del sistema legal62.
Segunda: la interpretación persigue finalidades eventualmente opuestas: (i) hallar el sentido correcto derivado del texto de la norma; o, (ii) hallar el propósito de la norma63. Por otro lado, la interpretación emplea diversos métodos que no necesariamente se encuentran en armonía (p.e. interpretación histórica v. interpretación funcional). Consecuentemente, su aplicación puede generar resultados contradictorios. Esos resultados impiden la eliminación uniforme de las contradicciones internas del sistema legal.
Tercera: la interpretación es (generalmente) aplicada para proteger un valor o una preferencia. Esto significa que el intérprete toma una decisión que sea consecuente con sus valores o preferencias, y luego justifica dicha decisión en función de alguno de los métodos de interpretación64. Esta tendencia impide la eliminación uniforme de las contradicciones internas del sistema legal.
6. LÍMITES (CONTINÚA)
En teoría, las herramientas de la analogía y del fraude a la ley permiten superar el formidable obstáculo que supone no poseer la capacidad de identificar todas las acciones y situaciones relevantes que se presentan en el plano social; ni la capacidad de anticipar todos los intentos a ser realizados (por personas, organizaciones e incluso estamentos del Estado) para evadir los efectos de las normas. En realidad, sin embargo, las referidas herramientas presentan serias limitaciones, pues se encuentran sujetas al “riesgo de la retórica”65.
Como afirman Schlag y Griffin:
Judges and lawyers are routinely called upon to ‘apply the law to the facts’.