"Una carcajada en un velorio". Juan Carlos Herrera Correa

Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу "Una carcajada en un velorio" - Juan Carlos Herrera Correa страница 2

Скачать книгу

       Bibliografía

       Cronología

      Lista de ilustraciones

       Ilustración 1. Propaganda que ilustra la publicación del álbum

       Ilustración 2. Ricardo Rendón y Mario Ibero

       Ilustración 5. Agosto 7 de 1930

       Ilustración 6. Centenario de la muerte del Libertador

       Ilustración 7. Para los hombres de buena voluntad

       Ilustración 8. Año nuevo 1931

       Ilustración 9. Con tinta indeleble y Polvo eres y en polvo te convertirás

       Ilustración 10. Las opiniones divididas

       Ilustración 11. Ante el bloque liberal

       Ilustración 12. El primer aniversario

       Ilustración 13. Cosi va il mando

       Ilustración 14. Reincidencia

       Ilustración 15. La reorganización del M. de O. P.

       Ilustración 16. Juegos malabares con “los del balde”

       Ilustración 17. Hamlet príncipe de Dinamarca

       Ilustración 18. Nuestras relaciones con Rusia

       Ilustración 19. ¡Al año!

       Ilustración 20. Cómo pasaron las cosas

       Ilustración 21. El ministro reportero

       Ilustración 22. Día de fiesta

       Ilustración 23. El momento político

       Ilustración 24. Las auras populares y las cometas de agosto

       Ilustración 25. En los puros ladrillos

       Ilustración 26. El viaje del presidente

       Ilustración 27. La Constitución del 86

       Ilustración 28. El doctor

       Ilustración 29. Los “Tigrecitos” en Tunja

       Ilustración 30. La justicia cojea, pero...

       Ilustración 31. La víctima desconocida

       Ilustración 32. Los escrutinios de Bolívar

       Ilustración 33. El Escuadrón Silvio Villegas

       Ilustración 34. El desarme de la provincia de García Rovira

       Ilustración 35. El relámpago del Catatumbo

       Ilustración 36. Santas pascuas

       Ilustración 37. El sanalotodo

       Ilustración 38. El Catatumbo ante la cámara

       Ilustración 39. El memorial de Quintín Lame a la Cámara

       Ilustración 40. Leiga pa que se instruiga

       Ilustración 41. Se acabó el Catatumbo

       Ilustración 42. La última caricatura del maestro Rendón

      A Luis Vidales

      Ancho el sombrero se posa pájaro negro en su cabeza y no es la tristeza con la que el pintor adorna el cuadro. Es el país Con su botella de ajenjo Sobre la mesa donde un día él en contra Vía, escribió, “No me lleven a casa”, mientras la pequeña pistola apunta contra el tiempo cincuenta años después, desde el agujero de la sien por donde se le escapa todavía la caricatura de la patria.

      “Ricardo Rendón”, de Armando Orozco Tovar1

       PRÓLOGO

image

      Ricardo Rendón o el espíritu enigmático y callado

      Rendón estaba llegando en ese tiempo a una de las etapas más agudas y atormentadoras del alcoholismo, y comprendía, y temía que lo que había hecho su vida y su gloria, la claridad y firmeza de su línea, la inspiración mordaz, el ingenio servido físicamente por una maestría insuperable, estaba llegando poco a poco a su término. Es cierto también que debió parecerle, en medio de su temblorosa visión del futuro cercano, que la cantera de donde extraía la inspiración para sus dibujos, estaba a punto de cerrarse. Y decidió romperse la cabeza en un momento de terrible desfallecimiento y de supremo valor.2

      ¿¡A quién no impresiona Rendón!? Todo de negro, del ancho sombrero a los zapatos largos que me los imagino, como un gitano de taberna en taberna en la Bogotá aquella de su tiempo; presente en todo y ausente con todos. Disfrutando de la calle de esa pequeña Bogotá que era la de su tiempo, y que solo en un recorrido breve daba para toparse con Alberto Lleras, con León de Greiff, con Luis Tejada y con José Mar, y con toda esa muchachada que a poco andar sería la clase literaria y política de Colombia.

      El joven historiador Juan Carlos Herrera dialoga con todos los implicados en adivinar y suponer lo que fue vida y muerte de Ricardo Rendón. En realidad, nadie ha podido saber qué fue lo uno y lo otro. Aproximaciones a un hombre que dejó para que lo juzgaran no su vida íntima, sino su gráfica. Fue hijo de Ricardo Rendón y Julia Bravo, estudió en el taller del maestro Francisco Antonio Cano y en el Instituto de Bellas Artes, dirigido por José Antonio Gaviria, en Medellín. Sus primeros dibujos aparecieron en Panida, revista de un juvenil grupo que capitaneaba León de Greiff. Frisaba apenas los diecinueve años. Escribió versos y su primera caricatura fue publicada en Avanti, que dirigía Samuel Delgado. Fue

Скачать книгу