Enigmas de las Américas. Kris Lane

Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу Enigmas de las Américas - Kris Lane страница 10

Enigmas de las Américas - Kris Lane Enigmas de las Américas

Скачать книгу

Hernández”27. A esta expedición le tomó un mes atravesar hasta el Pacífico. En las costas del virreinato del Perú tomaron muchas presas. Cavendish retornó a Londres en 1588, cuando toda Inglaterra celebraba la vergonzosa derrota de la Armada Invencible, entonces la reina Isabel I expresó: “El rey de España ladra mucho pero no muerde. No nos importan los españoles; al fin y al cabo sus navíos cargados de oro y plata de las Indias se dirigen a nuestro país”28. Curiosamente se dice que las noticias sobre las hazañas del corsario Drake y su circunnavegación al mundo no llegaron a Inglaterra sino hasta el retorno de Cavendish, quien entregó valiosa información sobre las rutas marítimas, estas noticias habían ampliado mucho más el conocimiento sobre la geografía de las costas americanas.

Image

      El mapa de América de Abraham Ortelius (1587) incluye el conocimiento resultado de las expediciones de la época. Como se puede ver, se dibuja el Estrecho de Magallanes como el paso donde además se ubica la región de “Patagones del reino de los gigantes”, que curiosamente se presenta separada mediante el Estrecho de una nueva masa continental denominada “Terra del Fuego”. Además, ubica varias embarcaciones en el Pacífico que reflejan la posibilidad de una navegación hacia Occidente y las islas del Pacífico, todo este registro cartográfico fue posible debido los sorprendentes viajes de Magallanes, Drake y Cavendish (Imagen 8).

Image Image

      IMAGINARIOS Y FANTASÍAS SOBRE EL MAR DEL SUR

      Maris Pacifici es el primer mapa dedicado al Pacífico (Imagen 9), y está centrado en el viaje de Magallanes, como denota la imagen del barco de la Victoria como la figura central del mapa (Imagen 9). Además este mapa registra la información adquirida hasta entonces sobre la cuenca del Pacífico y sus promesas (Imagen 9).

      Los mapas que incluyen el Maris Pacificum o Mar del Sur de finales del siglo XVI evidencian todavía un marcado desconocimiento y, por qué no, también la persistencia de alegorías medievales. Su iconografía incluye barcos navegando hacia el Asia, monstruos marinos e intentos de ubicación, sobre todo de las islas, pero también incorporan la posible existencia de una gran masa continental al sur de América, la nomenclatura de estos mapas usa varios nombres como: Terra Incógnita, Terra Australis, Tierra Magallánica, Tierra patagónica e inclusive Tierra de Patagones del reino de los gigantes, para referirse a esta nueva masa continental no descubierta todavía. Estos registros confunden los mitos medievales con los nuevos conocimientos, resultado de las recientes expediciones que se atrevieron a cruzar el paso del Sur.

      El imaginario sobre la existencia de habitantes gigantes del Estrecho de Magallanes fue una constante en la cartografía del siglo XVI, se presentó desde muy temprano, de hecho en 1507 en su Cosmographie introductio, Mathias Ringman (Geógrafo francés, siguiendo las reflexiones de A. Vespucio) escribió: “ Pero lejos hacia el polo antártico es una cierta tierra, una tierra cual una raza de hombres desnudos habita...”29

      En agosto de 1520, al llegar a las costas de la Patagonia, Pigafetta, marinero de la expedición de Magallanes, narra cómo “de las entrañas de la tierra, presentase de improvisto en la playa un hombre casi desnudo, de talla gigantesca...”30. Más adelante agrega:

      En signo de paz seguramente, cantaba y danzaba al propio tiempo, echándose a la vez polvo sobre la cabeza. Magallanes sabía algo de aquella mímica primitiva, pues enseguida envió a tierra un marinero –con orden de hacer los mismos gestos, en señal de paz y amistad.31

Image

      También el famoso Mapamundi de Diego de Ribero incluye la inscripción de Tierra de Patagones, situación que refleja cómo Ribero estuvo familiarizado con la descripción de esta región presentada por los sobrevivientes de la expedición de Magallanes, quienes detallaron a los patagones como hombres corpulentos, casi gigantes, cubiertos de pieles (Imagen 4).

      La persistencia sobre el mito de los gigantes de la Patagonia se encuentra en mapas posteriores, como se ve en el mapa Magellanica de John Ogilby32 (Imagen 10), obra encargada por la Corona inglesa, donde se puede identificar la supuesta existencia de gigantes, seres monstruosos y columnas de fuego en el paso por el Estrecho. Tal vez la representación de los gigantes patagones se encuadra en la descripción del “buen salvaje”, aquel ser idólatra, semidesnudo, que para los europeos representaba la mezcla de salvajismo e ignorancia. En la iconografía de estos mapas también podemos encontrar la presencia de animales y monstruos marinos, una referencia mitológica presente en los relatos de marineros y por supuesto en la literatura que hacía referencia a las exploraciones por aquel paso Sur. Igualmente, en el mapa América, de John Ogilby, mediante la iconografía se introduce la dinámica relación entre el mundo conocido (Europa) y el registro etnográfico del Nuevo Mundo, cargado de la imaginación y fantasías de los primeros exploradores. En diciembre del año de 1770 Samuel Wallis, al mando de la corbeta Dolphin, al llegar al cabo Vírgenes:

      desembarcó con la determinación de aclarar de una vez para siempre las historias sobre los gigantes patagones, resucitada por Byron. Al medirlos, descubrió que los más altos eran simplemente personas de elevada estatura entre 1,80 y 2,05 metros, aproximadamente.33

      CONCLUSIONES

      Los mapas son una ventana al pasado, recogen no solo los conocimientos geográficos, sino también los imaginarios, la cultura y la construcción de identidades de una época, documentan los encuentros y desencuentros con otros, en este sentido los mapas son un registro etnográfico, de imaginarios y fantasías que llenaban los vacíos de las incomprensiones de los viajeros y cartógrafos, que no dudaron en incluir seres mitológicos, monstruos y sirenas y sugerían aguas torrentosas o temibles peces con cabezas de león para representar la geografía especulativa de lugares tan desconocidos y remotos para las mentes europeas como fue el paso por el Estrecho de Magallanes. Este constituyó un empeño por dar nombre a lo que descubrían, siempre en referencia a lo conocido por las mentes europeas, como si esos territorios hubiesen sido anónimos.

Image

Скачать книгу