Historias tardías. Stephen Dixon
Чтение книги онлайн.
Читать онлайн книгу Historias tardías - Stephen Dixon страница 19
El bateador que le seguía la mandó a rodar por el campo hasta quedar out, terminando la entrada. No anotaron otra carrera, pero él sentía que había hecho todo lo que pudo por ganar. Dos largos indiscutibles, ningún error ni strike, y había conectado sus únicas carreras. En cualquier caso, estaban tantos puntos abajo, con un solo turno más de bateo por delante, que una carrera o dos más ya no ayudarían.
Les dijeron que al terminar el juego fuesen a estrecharles la mano a los del equipo contrario, que tomaran los refrigerios que hubiera –magdalenas, galletitas dulces y limonada–, ya que probablemente no llegarían de vuelta a tiempo para cenar antes de acomodar las mesas y servir –así que cenarían más tarde–, y que inmediatamente después subieran al camión.
Cuando le estrechó la mano al pitcher, le dijo:
–Buen juego. Su equipo lo hizo muy bien. ¿Qué puedo decir? Ganó el mejor. ¿Pero puedo preguntarte algo? Había una chica sentada en las tribunas. Parecía alta, y muy bonita, con el cabello rubio de verdad. De aquel lado –y señaló–. Con algunas amigas. ¿Sabes de quién estoy hablando?
Конец ознакомительного фрагмента.
Текст предоставлен ООО «ЛитРес».
Прочитайте эту книгу целиком, купив полную легальную версию на ЛитРес.
Безопасно оплатить книгу можно банковской картой Visa, MasterCard, Maestro, со счета мобильного телефона, с платежного терминала, в салоне МТС или Связной, через PayPal, WebMoney, Яндекс.Деньги, QIWI Кошелек, бонусными картами или другим удобным Вам способом.