La izquierda legal y reformista en Colombia después de la Constitución de 1991. Jorge Eliécer Guerra Vélez
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80 El apelativo de las comandancias varía según su concepción ideológica, tipología de guerrilla o estrategia militar. “Estado Mayor Central” en el epl, “Comando Superior” en el m-19, “Secretariado” en las farc y “Comando Central” en el eln.
81 Conclusiones de la Segunda Convención Nacional ¡A Luchar! Por el Poder Popular, 1988 (citadas en Restrepo, Andrés y Contreras, Marly. Flor de Abril…, op. cit., pp. 51-52).
82 Angarita Cañas, Pablo Emilio. Movimientos sociales y políticos alternativos. Medellín, 1991-1995. Maestría en Ciencias Políticas. Instituto de Estudios Políticos, Universidad de Antioquia. Medellín, 1996, p. 159.
83 Entrevista a Alfredo Aguirre, exmilitante de ¡A Luchar! y de la Corriente de Renovación Socialista (crs), miembro de la Dirección Nacional de la Corporación Nuevo Arco Iris.
84 Este frente, otrora considerado uno de los más aguerridos del eln, lleva el nombre de un sacerdote de Aragón, España, quien se vinculó al grupo finalizando la década del sesenta y que suscribe un comunicado en 1970 donde justifica las razones de su decisión. En 1974 murió en combates contra el ejército. También es conocido como el Frente de Guerra Oriental, dada su presencia en la región de Arauca, donde el eln ha tenido su mayor retaguardia, en parte por la extorsión a las compañías petroleras.
85 Una columna del eln, la Astulfo González, decidió irse con la crs (una columna la conforman entre veinte y cincuenta combatientes).
86 Hay que tener presente, independientemente de que ello corresponda a una etapa posterior en la existencia del eln, que en su debilitamiento militar, social y político es el paramilitarismo lo que más ha incidido, en menor grado que las farc, su base social fue más fácilmente dinamitada. Cabe preguntarse cómo se habría dado tratamiento a las divisiones en el eln en periodos previos, por ejemplo, durante las conversaciones de Caracas, en 1991, y luego en Tlaxcala, México, en 1992. Es previsible que este grupo aprovechó la negociación para ganar terreno político sin descuidar lo militar, por algo no tomó la misma decisión que la crs.
87 Entrevista a León Valencia, en noviembre de 1998, Bogotá (citada en Restrepo, Andrés y Contreras, Marly. Flor de Abril…, op. cit., p. 74).
88 Restrepo, Andrés y Contreras, Marly. Flor de Abril…, op. cit., p. 88.
89 Ibid., p. 89.
90 Se les atribuye también una influencia a los intelectuales reunidos alrededor de la revista Opción, y Fernando Hernández (alias Jacinto Ruiz), citado en el texto del epl, y que fuera el jefe de relaciones internacionales de la uc-eln.
91 En particular la lista de la up fue una de las que se promocionaron.
92 Entrevista a Fernando Hernández, miembro de la Junta Nacional de la crs, en noviembre de 1999, Bogotá (citada en Restrepo, Andrés y Contreras, Marly. Flor de Abril…, op. cit., p. 85). Los datos son de la Corporación Nuevo Arco Iris, pero con respecto a los años siguientes hablan de un número de setenta y siete combatientes y simpatizantes asesinados o desaparecidos. La mayoría de casos se les ha imputado a los paramilitares y a algunos miembros de la fuerza pública.
93 Entre siete militantes asesinados en Cali, se encontraba Carmen Elisa Pereira (alias Silvia), ficha del eln en ¡A luchar!, pero que abogaba por el diálogo.
94 No faltará el cinismo de quienes atribuyen tales asesinatos a la persistencia de la combinación de todas las formas de lucha. Negando la pugna en el seno de una misma agrupación entre quienes optan por la lucha política y quienes prefieren la vía armada, el contexto también pesa en favor de una u otra posición. Para los primeros a veces la única manera de no ser blanco de las balas es una renuncia total al proyecto; lo que no es fácil, pues quedan con la sensación de no haber hecho valer su posición, y lo que es peor, su renuncia puede ser vista como traición a la causa revolucionaria, llegando a ser víctimas del hostigamiento y la eliminación.
95 En octubre de 1991 la crs rechazó actos dinamiteros del eln contra la infraestructura energética y petrolera del país.
96 Prueba de que las relaciones entre la crs y el eln no se deterioraron es que esta última proporcionó corredores de seguridad de combatientes que se desplazaron a esa Primera Conferencia.
97 Fernando Hernández (La izquierda colombiana en la transición de la guerrilla a la lucha política, julio de 1992), citado en Restrepo, Andrés y Contreras, Marly. Flor de Abril…, op. cit., p. 80.
98 Ver Flórez, Carmen Elisa. Las transformaciones sociodemográficas en Colombia durante el siglo xx. Bogotá: Tercer Mundo, 2000. El acelerado crecimiento puede ya notarse finalizando la década del setenta cuando más de la mitad de la población colombiana se encontraba en las zonas urbanas.
99 En la Declaración Pública de la crs del 10 de febrero de 1992, expresiones como “paz” y “solución negociada del conflicto social y político” aparecerán en más de cinco ocasiones.
100 Declaración Pública de la crs, 10 de febrero de 1992 (citada en Restrepo, Andrés y Contreras, Marly. Flor de Abril…, op. cit., p. 84).
101 Con estas zonas las farc buscaban promover en sus combatientes el ejercicio político legal y de trabajo con la ciudadanía.
102 Declaración Pública de la crs…, op. cit., p. 83.
103 La guerra civil de El Salvador fue concluida con los Acuerdos de Paz de Chapultepec, en enero de 1992.