Del laboratorio al mercado. Álvaro Ossa Daruich

Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу Del laboratorio al mercado - Álvaro Ossa Daruich страница 9

Автор:
Серия:
Издательство:
Del laboratorio al mercado - Álvaro Ossa Daruich

Скачать книгу

tecnología de la Institución en traer regalías al investigador del Instituto Nacional de Investigaciones en la Amazonía.

      En 2015, INPA se asoció con el Ejército para desarrollar un proyecto llamado “Hombre Água”, que consistía en crear un modelo más compacto del purificador de agua que cabía en una mochila. La versión adaptada pesa aproximadamente ocho kilos y tiene la capacidad de depurar hasta 300 litros por hora. Lo que mejora la salubridad de los militares, al evitar el uso de una pastilla de cloro para depurar el líquido y aumentar la disponibilidad de agua para los militares, que antes utilizaban solo una cantimplora con capacidad de 1,5 litros de agua.

      En 2017, la patente fue concedida y en 2020, la tecnología fue licenciada a una nueva empresa.

      La industria de carnes y lácteos cuenta con altos estándares de manejo y reglamentaciones sanitarias, la cual busca certificar tanto la calidad de los productos como el manejo sanitario de los animales. A la vez, la tuberculosis bovina es una de las principales afecciones a las que está expuesto el ganado, causando un gran daño económico al reducir la eficiencia en la producción.

      En Chile, es obligatoria la certificación de ausencia de la enfermedad mediante la observación de lesiones sospechosas encontradas en plantas que faenan la carne. Además, se requiere contar con un diagnóstico acelerado confirmatorio, con la finalidad de trazar los rebaños infectados e iniciar acciones de saneamiento oportunas. Con esta oportunidad a la vista, la doctora en bioquímica y biologia molecular, Ana María Zárraga, académica de la Facultad de Ciencias, y el investigador, bioquímico y doctor en Ciencias y postdoctorado, Germán Rehren, ambos de la Universidad Austral de Chile (UACh), desarrollaron un kit de reacción en cadena de la polimerasa –conocida como PCR por sus siglas en inglés– en tiempo real para Mycobacterium bovis, patógeno que causa tuberculosis en bovinos, animales domésticos y silvestres, y en humanos, llamado Boviman.

      La detección mediante el uso de Boviman demora solo 3 horas, comparado con la detección mediante cultivo, que toma 60 días. Además, confirma la presencia de tuberculosis con 95% de sensibilidad y 97% de especificidad.

      La investigación se desarrolló gracias al financiamiento del Estado de Chile y contó con el apoyo de la empresa Biosonda, la Asociación Gremial de Leche de Biobío, mataderos Frigosor Ñuble y profesionales veterinarios del Programa de Tuberculosis del Servicio Agrícola Ganadero (SAG), entidad estatal encargada del desarrollo de la agricultura, los bosques y la ganadería mediante la protección y mejoramiento de la salud de los animales y vegetales. Consiguió, además de la generación del kit PCR en tiempo real, la generación de un mapa de distribución nacional de las variantes genéticas del patógeno para trazar rutas de diseminación de la enfermedad, lo que ha contribuido a validar el kit entre estas variantes.

      El kit se transformó en la prueba oficial para la vigilancia de tuberculosis en Chile, validado por el SAG, y ha permitido contar con un diagnóstico acelerado confirmatorio de BTB en lesiones sospechosas encontradas en plantas faenadoras de carne y certificar rebaños libres de BTB, requisito exigido por el mercado internacional de lácteos y carnes. Su uso ha sido clave en programas de erradicación, ya que permite trazar los rebaños infectados e iniciar acciones de saneamiento oportunas para así reducir el daño económico y disminuir los problemas que la tuberculosis bovina causa en la producción.

      Boviman® obtuvo el Premio Nacional a la Innovación Avonni en Categoría Salud el año 2012. La tecnología tiene marca registrada y cuenta con patentes de invención concedidas en Chile, México y Argentina.

      El kit inició su comercialización el año 2006, en una primera etapa, directamente desde la Universidad Austral de Chile al SAG hasta que, el año 2008, la Universidad firmó un acuerdo con la empresa Roche Chile Limitada para que se hicieran cargo de la venta. Luego de cinco años, la Universidad decidió dar término al contrato con Roche para entregar la comercialización a la spin off que formaron los inventores del kit, dicho spin off no llegó tener actividad comercial, por lo que la Universidad Austral siguió vendiendo el kit directamente, principalmente al SAG.

      Luego de esto, y liderado por la oficina de transferencia tecnológica de la misma universidad, en marzo del 2019 se firmó un contrato de licencia con la empresa Biotecom SpA, la que desde ese entonces ha comercializado la tecnología en todo el país (G. Rehren, comunicación personal, 2020).

      Según datos del Ministerio de Salud de Chile, uno de cada cuatro chilenos sufre de alguna alteración de la función tiroidea, siendo la formación de nódulos una de las principales afecciones. Los nódulos en la glándula tiroidea pueden detectarse en hasta el 50% de la población adulta y bajo ciertos criterios clínicos, requiriéndose la evaluación de la naturaleza del nódulo para determinar si es patología benigna o maligna.

      El método estándar para determinar la naturaleza de un nódulo tiroideo es la evaluación citológica de una muestra obtenida por punción con aguja fina (PAF). Una limitación de la PAF es que aproximadamente uno de cada cinco casos es informado como indeterminado. Dado que el 25% de las PAF indeterminadas son malignas, en muchos casos la incertidumbre se resuelve extirpando la tiroides, lo que permite resolver en forma definitiva el diagnóstico. Como resultado, en un 75% de los casos indeterminados operados, la cirugía se realiza en forma innecesaria. Esto expone a muchos pacientes a los riesgos y altos costos de la cirugía, además de generar dependencia de por vida a la suplementación hormonal.

      Este problema clínico motivó a investigadores de la Pontificia Universidad Católica de Chile, a través del Consorcio Tecnológico en Biomedicina Clínico-Molecular (BRMC), a desarrollar una nueva herramienta que permite optimizar diagnósticos en pacientes con nódulos tiroideos indeterminados. Es así como un equipo multidisciplinario liderado por el cirujano oncólogo Hernán González desarrolló ThyroidPrint, un test basado en la integración del análisis de diez marcadores genéticos de una muestra de PAF e inteligencia artificial, que permite predecir con 95% de exactitud qué pacientes con PAF indeterminado tienen un nódulo benigno y pueden evitar la cirugía innecesaria.

      El año 2012, el doctor González fundó GeneproDx. Esta startup licenció los derechos de ThyroidPrint y, tras levantar más de 8 millones de dólares de capital de riesgo y seis años de I+D, logró validar clínicamente ThyroidPrint en un ensayo clínico multicéntrico realizado en Chile y los Estados Unidos, que reclutó a más de 4.000 pacientes.

      En 2018, GeneproDx lanzó ThyroidPrint al mercado latinoamericano como un servicio centralizado. Hasta julio de 2020 se habían realizado los diagnósticos de más de 260 personas, entre las cuales se evitó la cirugía a más del 70% de los casos, generando un gran impacto en la calidad de vida de estos pacientes. Además, la simplicidad tecnológica del test permitió que fuera un 70% más económico que sus competidores y que los costos en salud de estos pacientes se redujeran en más de 40%.

      A inicios del 2020, GeneproDx firmó un acuerdo con la empresa multinacional de diagnóstico molecular Biocartis para el codesarrollo de una nueva versión de ThyroidPrint en un formato de un kit que permite realizar el test en cualquier laboratorio del mundo en solo dos horas. Esto posicionará a GeneproDx como la primera empresa en el mundo en contar con un kit para nódulos indeterminados con acceso al mercado global (H. González, comunicación personal, 2020).

      Según Brem & Voigt, (2009), las ideas que se pueden transformar en innovación basada en ciencia pueden provenir de dos fuentes. Una de ellas es la necesidad del mercado denominado en inglés como “market pull” o “demand pull”, lo que quiere decir que son las empresas las que dirán qué es lo que se requiere.

Скачать книгу