Relatos sociológicos y sociedad. Claudio Ramos Zincke

Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу Relatos sociológicos y sociedad - Claudio Ramos Zincke страница 22

Автор:
Серия:
Издательство:
Relatos sociológicos y sociedad - Claudio Ramos Zincke

Скачать книгу

ciencias sociales más destacadas del período en los 17 números que alcanzaron a publicar32.

      Con el golpe militar la intensa actividad del Ceren llega a un abrupto fin. Junto con muchos otros profesores comprometidos políticamente, el trabajo académico de Moulian en la universidad se corta en ese momento. Su lugar de trabajo, desde el año siguiente será la Flacso, donde permanecerá por veinte años, hasta 1994, siendo este un período de significativo trabajo académico, muy decisivo en su obra.

      La Flacso es un organismo internacional creado en 1957, como iniciativa de la Unesco y en convenio con gobiernos de América Latina, con el objetivo principal de promover las ciencias sociales en la región. En Santiago se funda la primera sede y será la única hasta 1973. En 1957 se creó también, como parte de Flacso, la Escuela Latinoamericana de Sociología, iniciando la formación en esta disciplina en el país y siendo seguida en los dos años posteriores por la Universidad de Chile y la Universidad Católica. Esta escuela, con una fuerte orientación hacia la sociología del desarrollo y buscando abordar la problemática social de la región, formará a las primeras generaciones de sociólogos de América Latina. Entre sus alumnos más destacados se cuentan a Enzo Faletto (primera promoción), Hugo Zemelman, Manuel Mora y Araujo, Rubén Kaztman, Edelberto Torres Rivas (Franco, 2007). En 1966 se agrega una Escuela Latinoamericana de Ciencia Política. Poco antes del golpe, se había intentado articular el trabajo de investigación en el centro y en 1971 se había creado el Instituto Coordinador de Investigaciones Sociales (ICIS), pero, por diferencias internas, cuando llega 1973 la iniciativa no había rendido frutos. Con el golpe militar se suspenden las clases, se desbandan sus estudiantes, y se reducen las actividades, incluyendo el término del ICIS. Como organismo internacional, la Flacso gozaba de privilegios que protegían a sus integrantes, sin embargo, el gobierno de Pinochet vigilará sus publicaciones y desahuciará el convenio en 1978, reduciendo así su protección y financiamiento.

      La salida de personal internacional de la Flacso, ante las nuevas condiciones, produce un recambio en su composición. Los integrantes de la época reconocen el carácter político que tuvo la selección de nuevos integrantes, especialmente la coloración mapucista que ella tuvo. El secretario general de la Flacso en 1973 era Ricardo Lagos, y entre los nuevos integrantes que se incorporan están, entre otros, Tomás Moulian (1974), Manuel Antonio Garretón (1975), José Joaquín Brunner (1976), Augusto Varas, Jorge Chateau, Carlos Catalán, todos militantes MAPU provenientes de la Universidad Católica. Algunos de los miembros de la Flacso caracterizan esto como una especie de “captura de la Flacso” por el MAPU. Esto fue experimentado así particularmente en un primer período. No obstante, conviven con otro grupo significativo, que es socialista y no de la Universidad Católica, en el cual se encuentran Enzo Faletto, Ángel Flisfisch, Julieta Kirkwood y Rodrigo Baño. Otro distinguido integrante será Norbert Lechner, que se suma en 1974. Este también venía de la Universidad Católica, en cuanto había trabajado en el Ceren, pero su militancia MAPU había sido corta: entró en 1972 y se retira en 1973, cuando el partido se escinde. Posteriormente, no volverá a militar en ningún partido. Probablemente él sea un importante elemento neutralizador de las diferencias entre ambos grupos. Como señala el mismo Lechner (2007 [2004]: 26), esa no solamente era una diferencia de partido, sino que de “mundos culturales muy distintos que cuesta poner a interactuar”.

      Durante la dictadura, la Flacso se convertirá en uno de los centros académicos de pensamiento alternativo más destacados. A principios de los años 1980 ya existía una diversificada malla de tales centros: Cieplan, dedicado a estudios económicos y con un mayor acceso público que los otros centros; SUR, con marcada orientación hacia los movimientos sociales y educación popular; Vector y PET, con investigaciones en áreas de trabajo y economía; Ceneca, con estudios en área de la comunicación; CIDE y PIIE, en el ámbito de la educación; GIA, en el ámbito agrario; entre otros. Flacso es el que asumió un carácter más intelectual académico, con mayor atención a la reflexión teórica.

      A fines de los años 1980, la Flacso tendrá un prestigio intelectual no solo en Chile, sino a nivel latinoamericano, y se percibe en este centro académico “la existencia de un núcleo innovador del pensamiento político social sobre América Latina” (Calderón, 2000).

      Los Documentos de Trabajo que este grupo comienza a producir en 1974 son un buen indicador, al menos cuantitativo, de su productividad. Entre 1975 y 1984 publican 226 documentos, y para 1995 la cantidad total ya llega a 825. El más prolífico de todos es Brunner, quien publica 111 de tales documentos. Le siguen, en cantidad, Garretón, con 76; Augusto Varas, con 55; Lechner, con 47; Ángel Flisfisch, con 41; Moulian, con 26 (Bravo y Vargas, 1999). Estas publicaciones, no obstante, constituyen solo una parte de la productividad de estos investigadores. Además, se suman libros y artículos en revistas diversas33.

      Moulian opta por permanecer en Chile, mientras muchos en condiciones similares a la suya optan por el exilio. Una razón que él destaca es la experiencia de su padre, refugiado de la Guerra Civil española: “yo viví toda mi infancia y juventud, mientras viví en mi casa paterna, viendo a mi padre acercarse al mapa, al mapa y a la foto ya desvaída de su ciudad natal, Zarauz, al lado de San Sebastián, y mirarla, y suspirar, y leer el periódico España Republicana que conseguía que se lo trajeran de Buenos Aires […]. Yo sabía que Chile tenía [para mí] el mismo significado que tenía España para mi padre y ya lo había [experimentado] cuando estuve en Lovaina, sentir que la vuelta a Chile era volver al paraíso. Entonces, yo sabía que no podía dejar de estar aquí y preferí no moverme. […] y eso fue posible porque estaba la Flacso”34.

      Moulian vive la dictadura bajo el alero de la Flacso. Su primer foco de trabajo fue un análisis crítico sobre la Unidad Popular, en el cual se alía con Manuel Antonio Garretón, quien tenía un proyecto en la materia y un equipo trabajando con él, que en 1974 se había adosado a Flacso, aún sin estar contratado por la institución, usando fondos de Clacso35. El grupo hace, como dice Moulian, “una gigantesca cronología de la Unidad Popular, día por día, diario por diario, con un resumen de lo que había pasado”. Esos materiales les servirán de base para su análisis, el que saldrá como documentos de trabajo y, finalmente, como un libro, en 1983.

      Los integrantes de la Flacso, desde los primeros años bajo la dictadura, estimulados por la necesidad de analizar lo que estaba sucediendo, lo cual a todos les había significado un remezón emocional e intelectual, realizan un intenso diálogo, tanto en grupos de trabajo, reuniones periódicas, como en espacios informales. A ello contribuye, sin duda, el clima represivo que fue muy intenso al menos hasta 1977. Ante la continua incertidumbre, el enclaustramiento institucional opera como mecanismo defensivo. Se reúnen para hacer análisis político, para discutir sobre enfoques teóricos. Las conversaciones más intensas de Moulian son con Lechner, Brunner, Garretón y Juan Enrique Vega. Son muy amigos y, sin embargo, con Brunner y Garretón tiene continuas discrepancias, las que a fines de los ochenta se acentuarán, particularmente con Brunner. De cualquier modo, el diálogo es intenso; se leen recíprocamente lo que escriben y suman las reflexiones de los otros al propio trabajo, en un proceso de acumulación colectiva.

      En este período, Moulian realiza varios trabajos en colaboración. Además de la labor con Garretón, investiga en conjunto con Pilar Vergara, otra socióloga de la Universidad Católica, quien había sido investigadora del Ceren y participante de Cieplan. Por otro lado, Moulian lleva a cabo trabajos con jóvenes que se vinculan a Flacso. Lo hace con Germán Bravo, un sociólogo de la Universidad Católica, que era visto como muy promisorio, pero que murió tempranamente, por propia decisión, y con Isabel Torres, una joven historiadora. Ella participa y debate activamente en seminarios impartidos por Moulian y este la invita a participar en un artículo sobre la derecha; luego, se embarcan en un trabajo sobre la trayectoria político ideológica de la derecha que producirá varias obras, y solidificará en Moulian una orientación histórica que había ido gradualmente adquiriendo mayor importancia.

      En el plano de su vida privada, Moulian tiene como

Скачать книгу