¡Ey, las ideologías existen!. Mario Riorda

Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу ¡Ey, las ideologías existen! - Mario Riorda страница 8

Автор:
Серия:
Издательство:
¡Ey, las ideologías existen! - Mario Riorda

Скачать книгу

las cualidades personales y los atributos propios del enunciador, irían en desmedro de su identificación con una corriente partidaria, una ideología tal como se entiende en sentido fuerte, explícito. Aunque no es algo que esta investigación busque medir, sí puede inferirse este rasgo, y obtener datos para ulteriores indagaciones.

      1.2.2. El segundo sujeto considerado, el destinatario, se abre a tres posibles modos de aparecer en el discurso: el prodestinatario, que es el partidario (“liberal vota liberal”, por ejemplo); el paradestinatario, que es la masa anónima, todos, los indecisos; y el contradestinatario, que es el oponente o rival. El primero y el tercero serán presencias más ideológicas. Detectar estos casos permite conocer, entre otras cuestiones, el nivel de discurso polémico que se entabla (y ver si se da en coincidencia con discursos más ideologizados).

      1.3. Función ideológica

      Se distinguen las siguientes funciones:

      1.3.1. Descriptiva-explicativa. Pertenece al ámbito del saber, y lleva el sentido o propósito de hacer comprensibles determinadas situaciones sociales. El enunciador presenta como verdad las afirmaciones que realiza (sabe) y hace pedagogía (hace saber), con un lenguaje comprensible que se constituye en una plataforma didáctica desde donde actúa. Ofrece una explicación del presente (Easton, 1979). Enseñar es un objetivo explícito de la ideología, a los miembros y a los nuevos adeptos (van Dijk, 2003).

      1.3.2. Programático-motivante. La ideología está motivada a la acción para influir en la opinión pública y no formada en abstracto. Es del ámbito del hacer (y del poder hacer), por eso esta función se centra en presentar un programa de acción, con el intento de abrazar, rechazar o buscar elementos para regular el curso de la historia. La ideología es un nexo entre las ideas y la acción. Registra una intensa carga emotiva como valor diferencial, lo que convierte el enunciado en algo motivante, que vale la pena.

      1.3.3. Imperativo-prescriptiva. Del ámbito del deber (lo que se debe hacer), es la función de los enunciados en los que se exige la obediencia en el pensamiento y en la conducta de los individuos que se le adhieren. Establece un nexo con cualquier forma de asociación colectiva, dirigida a mantener la disciplina entre los simpatizantes y a traducir en realidad al sistema ideológico (Shils, 1979). No se trata de un imperativo explícito, sino de una condición para acceder a las verdades y al bien que se enuncian. Si se desea esto, hay que hacer lo que se propone: votar al candidato, elegir la opción que se presenta.

      1.4. Estructura cognitiva de las ideologías

      Este subcomponente se refiere a los enunciados que sostienen las ideologías, es decir, la expresión de su contenido. Aquí se exponen las variables que construyen los rasgos cognitivos en un discurso ideológico, aunque no se tomarán todos en cuenta dentro de la matriz. Esos rasgos son:

      a) Coherencia interna. La estructura de creencia y los valores debe ser coherente para que la ideología sea considerada como tal. Desde este punto de vista, la coherencia adquiere sinónimos como: consistencia, estructura, interrelación lógica, sistema, entre otros. Cuanta más coherencia interna manifieste el discurso, es decir, cuanto más explícita sea la relación entre sus ideas, más ideológico. Lo contrario sería un discurso cambiante en la forma y en el contenido, que no resuelve temas presentados o no retoma problemas o íconos.

      A pesar de ser un rasgo fundamental para determinar el alcance de una ideología, en este estudio hemos dejado de lado el subcomponente de coherencia interna, pues éste remite a la comparación entre múltiples discursos a lo largo del tiempo, para conformar un sistema político. En nuestro caso, la matriz se aplica a textos concretos, en un tiempo y un lugar determinados (por ejemplo, discurso de apertura de Lula en Brasil), y su coherencia interna se da por supuesta siempre, en tanto es un texto aislado, no comparado. Por eso esta variable no está incorporada en la matriz.

      b) Contraste externo. La existencia de la ideología se da siempre en contraste con alguna creencia o valor que no representa tal o cual ideología. Este elemento es crucial para la generación de modelos espaciales o mentales. Prima, como elemento consustancial a las interacciones políticas, la legitimación del yo y del nosotros y la deslegitimación del otro, siendo éste un rasgo distintivo de la pregnancia ideológica de un discurso político (van Dijk, 1999; Brito, 2007: 791). Claramente destaca la función de diferenciar lo bueno y lo malo y presupone una democracy adversary con ciudadanos con conflictos de intereses (Mansbridge, 1983). Visión dicotómica entre amigo-enemigo: cuanto más busque diferenciarse, más ideológico se volverá el discurso.

      c) Facticidad, en el sentido de que una ideología realiza proclamas o reclamos veraces, o evaluaciones sobre hechos existentes. Michel Pêcheux (2003), igualmente, afirma que las ideologías no están hechas de ideas sino de prácticas, es decir están asociadas a hechos. Por la misma razón, la ideología es una realidad ahistórica, siempre está.

      d) Sofisticación refiere en general al carácter de razonamiento del proceso ideológico, es decir al grado de elaboración conceptual para presentarse a sí misma. En todo caso, es una función de pedagogía comunicativa, que hace más comprensible el uso de las etiquetas ideológicas para mejorar y aumentar la capacidad de capturar ideas comúnmente asignadas a la izquierda o la derecha (Zechmeister, 2006: 157).

      Por la misma razón que dejamos de lado la coherencia interna como variable en la matriz, la sofisticación también fue dejada de lado, por no aplicar de modo fehaciente a un texto único.

      1.5. Posición

      Se clasifica como sigue:

      1.5.1. Dominante. Muchas ideologías avanzan en patrones que tienen que ver con una estructura de dominación para desintegrar una actual estructura de dominación. Destaca la función que señala lo viejo como lo malo. Especialmente referidas al sostenimiento del régimen político y a apoyar la persistencia de la comunidad política en su conjunto (Easton, 1965). Reinterpreta los hechos históricos desde esa posición.

      1.5.2. Subordinada. Son los modos en que se expresa la ideología para denunciar alienaciones protestando por un statu quo y por sus beneficiarios. Destaca la función que señala lo existente (lo nuevo) como lo malo. Especialmente referidas a la derogación del régimen político y a apoyar la transformación de la comunidad política en su conjunto (Easton, 196579).

      2. El componente de políticas

      Este componente refleja la amplitud con la que las etiquetas ideológicas se vinculan para activar, aunque sea potencialmente, dimensiones de políticas. Refleja claramente la divisoria de políticas expresadas en el contenido de las propias etiquetas ideológicas, a partir de subcomponentes como el asunto que el candidato propone y la ubicación ideológica (izquierda-derecha).

      Dentro del asunto, se reconocen dos variables: por un lado, la versión programática (programa de políticas, en tanto propuesta de acción); por otro lado, la valencia, que aunque puede verse como un componente independiente, se incorpora metodológicamente en el componente de Políticas pues la valencia se reconoce en los asuntos que el candidato propone.

      El componente de políticas ayuda a detectar el posicionamiento ideológico de un candidato y lo que eso representa en términos de políticas o paquete de políticas, más allá de la tradicional dicotomía de Estado o mercado, simplemente por conocer la postura previa sobre la derecha o la izquierda, por ejemplo.

      Con todo, es importante reconocer que muchas veces el componente simbólico refleja más la diferenciación sobre izquierda y derecha que el propio componente

Скачать книгу